Carrión es conductor profesional y trabaja para Dipesa Group. | Daniel Espinosa

Francisco Carrión es uno de los conductores de Dipesa Group que se beneficia este año de la medida impulsada por su empresa, que ha optado por facilitar a trabajadores de fuera un alojamiento para cubrir plantillas. Este profesional considera «fundamental» ayudas de este tipo para quienes decidan trasladarse a Ibiza en verano. «Sin esa ayuda costaría mucho venir», insiste.

En su segundo año en la isla, Carrión reconoce que en el verano de 2022 su anterior empresa ya tuvo que facilitarle un alojamiento: «Estuve mirando y vi lo complicado que era encontrar una casa. Entre los precios y las estafas que hay en este tema, era muy difícil poder alquilar algo por cuenta propia», recuerda.

«Cuando me puse a buscar, todo lo que encontré el pasado año eran ofertas nada precisas y poco claras. Imagino que serían estafas y, cuando veía algo que me parecía más serio, era muy caro. Por mi cuenta fue imposible encontrar nada», asegura.

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Mientras que el pasado año dedicó varias semanas a intentar buscar un alojamiento en Ibiza, en esta ocasión le contactaron de Dipesa a finales de marzo para ofrecerle el trabajo y, lo más importante, una vivienda. Francisco reitera que, si no es por esta ayuda, ni se hubiera planteado este año venir a trabajar a la isla. Este conductor, que comparte piso con un compañero, abona a Dipesa un alquiler «razonable» ya que la empresa se ha encargado de arrendar alojamientos para sus empleados, adelantando incluso el pago de estas casas.

Carrión lamenta que muchos compañeros, incluso de otros sectores, han tenido que marcharse de la isla ante la imposibilidad de encontrar vivienda: «No tuvieron problema en tener trabajo, porque hay bastante, pero a la hora de buscar alojamiento y no encontrar nada, se tuvieron que marchar».

Con experiencia profesional en Austria o Reino Unido, Carrión afirma que una situación como la de Ibiza no la había visto en ningún lugar. «Lo que pasa en Ibiza no lo he visto en ninguna parte, ni en Londres, donde llegué y a los dos días ya tenía casa. Allí es muy caro, pero puedes encontrar un alojamiento, no como aquí», insiste.

Sin duda, para este trabajador el principal problema de Ibiza actualmente es la falta de vivienda. «Las autoridades deberían tomar cartas en el asunto porque hay mucho trabajo y gente que quiere venir, pero hay muy poco acceso a la vivienda», reitera Carrión, señalando la «ranquilidad» que da a los trabajadores medidas como la de su empresa.