Los vecinos denuncian que la planta asfáltica de Sant Rafel no dispone de declaración de impacto ambiental

Imagen de la planta asfáltica de Sant Rafel.

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La Asociación de Vecinos Puig des Planells ha emitido este viernes por la tarde un comunicado sobre la planta asfáltica de Sant Rafel para informar que, según Fiscalía y los agentes del Seprona de la Guardia Civil, «la ejecución del proyecto se inició sin haber obtenido previamente la declaración de impacto ambiental, un requisito fundamental para garantizar la protección del entorno y la salud de los residentes».

Estos vecinos recordaron que en verano del año pasado se instaló esta planta asfáltica en la zona de sa Coma, un proyecto que generó una gran preocupación entre los vecinos de la zona ante la falta de información y la posible afectación al medio ambiente». Por esta razón, llevaron la instalación de esta infraestructura a Fiscalía de Ibiza.

Este viernes, Fiscalía les ha contestado para informarles que «aunque no se ha podido cuantificar la posible existencia de impacto negativo medioambiental ni una repercusión negativa en la salud pública o el entorno natural» y, por tanto, los hechos no son constitutivos de un ilícito penal, «los agentes del Seprona, encargados de realizar el informe que se les pidió, han respondido deduciendo la posible comisión de una infracción administrativa muy grave». Según el mencionado informe, «la ejecución del proyecto se inició sin haber obtenido previamente la declaración de impacto ambiental, un requisito fundamental para garantizar la protección del entorno y la salud de los residentes».

Cabe recordar que las asociaciones de vecinos expresaron desde el inicio su «firme rechazo» a la instalación de esta planta, que consideran perjudicial para la calidad de vida en la comunidad. "Es inaceptable que se lleven a cabo proyectos de esta magnitud sin el debido proceso y sin considerar el impacto que pueden tener en nuestra salud y en el medio ambiente", afirmaron representantes de las asociaciones.

Los vecinos continúan, una vez más, exigiendo «transparencia y responsabilidad por parte de las autoridades competentes, así como el desmantelamiento inmediato de la planta, que aún no se ha realizado, tal como prometieron desde el Consell de Ibiza».