El grupo popular del Ayuntamiento de Eivissa criticó ayer «el cambio de filosofía» del equipo de gobierno al expresar su voluntad política de descalificar a urbano terrenos rústicos en la zona de sa Joveria con el fin de lograr de forma gratuita solares para un nuevo hospital, un colegio y equipamiento público.

La crítica fue expresada por los concejales de la oposición Virtudes Marí y Toni Prats, que señalaron que con este cambio a los propietarios «les ha tocado la lotería» porque el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) «contenía la previsión de la ampliación del hospital, la escuela de sa Jovería y equipamiento público como también preveía que la forma de adquisición del suelo era el de expropiación». Marí destacó que este suelo no era intrascendente para el plan general sino que se adecuaba a su planteamiento, que buscaba establecer una continuidad estructural entre la sierra y el continuo urbano. «Se está cambiando de modelo y de diseño de ciudad que pivotaba sobre dos cosas, sobre el puerto de Vila y sobre este continuo rústico de punta a punta ¿Qué queda del plan general de la idea que han vendido a los ciudadanos?», preguntó la concejala popular.

Por su parte, el teniente de alcalde de Vila, Santiago Pizarro, explicó a raíz de esta crítica que si se ha cambiado de opinión es porque de los más de 300.000 metros cuadrados del terreno, 40.000 serán para el hospital, 15.000 para el colegio y 10.000 para otras infraestructuras. «La única decisión que se toma después de tantas negociaciones es no ir a los tribunales e intentar acercar posturas. Por ello, en toda esta franja los propietarios podrán construir en 20.000 metros, la mitad de promoción libre y la otra de protección oficial», explicó Pizarro, aunque aclaró «que no hay nada cerrado a día de hoy» pero que esta es la línea en la que se está trabajando.

Por otra parte, el teniente de alcalde destacó que de esta forma, el proceso «será bastante más rápido» y que los 65.000 metros cuadrados «no se tendrán que expropiar porque no habrá que pagarlos».

Por último, Pizarro indicó que el resto del terreno, que son más de 300.000 metros cuadrados, quedará como rústico. «Estamos hablando de una pequeña parte y dentro de esa pequeña parte estamos hablando de 65.000 metros para infraestructuras para toda la población».

Cabe destacar que, tras plantear un nuevo hospital, el solar previsto para la ampliación del mismo aún no tiene destino.

Según explicó el teniente de alcalde, Santiago Pizarro, «había una discrepancia importante sobre el precio de expropiación entre los propietarios y la administración que habría hecho que todo el trámite se retrasara. «Sabemos que los procesos de expropiación son de por sí largos y que el hospital es un objetivo para que esta legislatura», destacó A esta cuestión, el concejal de Medio Ambiente, Joan Rubio, agregó que, jurídicamente, «si a un propietario le dejas un trozo de 20.000 metros rodeado por zonas urbanas tiene todo derecho a demandar que sea urbano y, si te demanda, tiene un 99% de probabilidades de ganar». Por otra parte, Pizarro destacó que estos propietarios ya han sido expropiados para el actual hospital, el recinto ferial y para el proyecto que nunca llegó a realizarse como es el 'Centre de les Arts'.