Ante la cancelación de vuelos en Eivissa a causa de la nube de ceniza del volcán islandés, la mayoría de los afectados que necesitaban salir de la isla optó por subirse a un ferri y se dio el caso de una persona que contrató un helicóptero para salir de la isla.

En el caso de algunos visitantes demorados, «aprovecharon para quedarse uno o dos días más en el hotel, hasta que se regularizaran sus vuelos», explicó el gerente de una cadena de hoteles en la isla.

Aunque algunos, presionados por la urgencia, consultaron la posibilidad de coger un vuelo en helicóptero, la empresa Inaer no pudo confirmar más que un servicio especial de traslado a la Península, que podría haberse tratado de alguien con necesidad de retorno.

El aeropuerto de Eivissa sufrió alrededor de treinta cancelaciones de operaciones aéreas en estos cuatro días, con destino u origen en Reino Unido, Italia, Alemania, Holanda, Francia, la Península y otros puntos de Baleares.

Para el caso de la opción de salida en barco, la empresa Balearia fue la primera en ampliar sus servicios, atenta a lo que estaba ocurriendo con las líneas aéreas.

Entre domingo y lunes, la compañía programó varios servicios extra entre los puertos de Palma de Mallorca, Eivissa y Dénia. Concretamente, un Palma-Eivissa-Dénia con salida del puerto de Palma a las 12.30 horas del lunes y de Eivissa a las 16.30 horas.

En sentido contrario, el buque que hizo la ruta Dénia-Eivissa-Palma salió a 21.00 horas desde la costa alicantina y desde Ibiza a la 1.30 horas de la madrugada.

Balearia reforzó además, el servicio entre las islas y Barcelona.

En lo que se refiere a la opción del helicóptero, fue muy consultada pero poco requerida.

De acuerdo a los datos suministrados por la empresa Inaer, con sede en Alicante, que presta servicio de transporte aéreo en la isla de Eivissa además del servicio de transporte sanitario de Formentera a Eivissa y de ésta a Mallorca, hubo muchas consultas de vuelos de urgencia que al final no se concretaron.

«No podemos decir con seguridad cuantos vuelos se hicieron. Sólo nos consta que uno de ellos, hecho a la Península, puede haber sido como consecuencia de la cancelación de vuelos de línea por la nube de cenizas, pero tampoco podemos asegurar que eso haya sido así», explicaron desde la oficina de marketing de la empresa.

Los helicópteros que Inaer posee en Eivissa podían volar sin ningún inconveniente a pesar de la nube de cenizas, y de hecho lo hicieron en sus rutas habituales.

Las consultas se repitieron una y otra vez en los días de cancelación de vuelos, pero no se confirmaron los servicios.

«Mucha gente utilizó la opción de volver a la península en un barco de nuestra empresa, incluso extranjeros», explicó una empleada de la empresa Baleària.