Imagen de la primera jornada del II Encuentro Informativo sobre puertos, logística y transporte marítimo

El responsable del departamento de Obras y Proyectos de Autoritat Portuària de Balears (APB), Jorge Martín, descartó ayer, en la segunda edición de los Encuentros Informativos sobre Puertos, Logística y Transporte Marítimo que tuvieron lugar en Eivissa, que el vertido proveniente de la draga del puerto pueda afectar a la reserva marina así como expandir el alga invasora, la caulerpa racimosa.

Durante su explicación, Martín, que fue responsable del puerto de Vila desde 1998 hasta 2004, señaló que en ningún caso el material a dragar «está contaminado». Aún así, se decidió desde Autoritat Portuària ubicar la zona de vertido a 23 kilómetros desde el puerto de Eivissa y a 17 kilómetros del límite de la Reserva Natural de ses Salines. «Estoy convencido de que no se generará ningún problema medioambiental», indicó Martín, que recordó que cuando se hicieron las obras del dique de es Botafoc, en el año 2000, ya se vertió en la misma zona, «y en Formentera ni se enteraron».

Después del verano

En este sentido, el responsable del Departamento de Obras y Proyectos de la APB explicó que el dragado se ha pospuesto hasta pasada la temporada turística con el fin de afectar lo mínimo a la temporada alta y está previsto que dure entre dos y tres meses. Esta operación se realizará con un buque que trasladará en cada viaje unos 4.000 metros cúbicos de dragado de los que tres cuartas partes serán agua y la restante de material sólido. Este periodo dependerá también de las condiciones climatológicas ya que, cuando se den circunstancias de viento o ciertas corrientes, el proceso se paralizará por seguridad.

En relación a la propagación de la caulerpa racimosa, Martín indicó que en principio «no existe más alga, en caso de que hubiera, se podrá detectar y erradicarla es bastante sencillo», apunto. Además, añadió que a 350 metros de profundidad es «muy complicado» que se vuelva a reproducir y «se descarta la presencia de vida». Por otro lado, también se rechaza cualquier afección a la posidonia, explicó el responsable del departamento.

En relación al dragado, Martín indicó que el coste se ha incrementado de forma considerable debido a la distancia que hay entre la zona del vertido y el puerto, hecho que provocará más horas de desplazamiento, así como a descartar el 'overflow', un mecanismo que hace que cada vez que se extraigan lodos se vierta de nuevo el agua a la zona dragada. Esta opción evitará las aguas turbias en el interior del puerto, aunque se deberán hacer más viajes a la zona de vertido.

«Los Andenes están colapsados por la escasez de superficie»

Jorge Martín hizo ayer un repaso a la historia del puerto de Vila y explicó la alternativa elegida por Autoritat Portuària para remodelar toda la zona portuaria. En este sentido, el responsable del departamento de Obras y Proyectos de la APB explicó que la Avinguda 8 d'Agost puede soportar mucho mejor el tráfico resultante de las conexiones marítimas que no el actual muelle de Levante. «El tráfico que genera el puerto no es tanto, pero en los Andenes se nota mucho más, están colapsados por la escasez de superficie», aclaró. Asimismo, Martín también se mostró convencido al señalar que la Unesco «quedó satisfecha con las explicaciones que se le ofrecieron». Desde APB apuntaron que las obras de ampliación del puerto no generarán más demanda «sino que se podrá atender la que hay con mejores infraestructuras». «En cualquier caso, sí puede generar tráfico de cruceros», apostilló Martín.