Imagen de la sala de plenos del Consell, donde tuvo luagar la asamblea de trabajadores.

El sindicato UGT celebró ayer una asamblea con los trabajadores de la empresa Grupo Playa Sol para informarles sobre la personación como acusación particular en el proceso judicial abierto. En este sentido, Manuel Pomar, abogado del Despacho Capellà, Pomar & Martos Abogados, indicó que durante las diferentes reuniones que se mantuvieron ayer con todas las partes se ha propuesto el nombramiento de un auditor externo a la empresa con el fin de ayudar al administrador judicial, Javier Perelló.

«Hemos planteado que sería conveniente el nombramiento de otro coadminsitrador, que no fuese del marco de la empresa, de la confianza de las administraciones y nuestra para que pueda ayudar y hacer un trabajo más técnico y económico», señaló el abogado sindical de Balears, Rafael Miguel.

De esta manera, los asesores jurídicos señalaron que es necesario tener un estudio detallado de la situación financiera de la cadena hotelera para poder hacer un balance exhaustivo, señaló Miguel, para poder tomar decisiones.

Primero, la viabilidad

Tanto Miguel como Pomar apuntaron durante la asamblea con los trabajadores que el objetivo principal es la viabilidad de la empresa. «Nuestra misión no es hacer daño a nadie, ni discutir pormenores. Queremos que la empresa funcione, que se pague lo que se tenga que pagar pero con la única misión de llegar a puerto, que es esta temporada, y que cada año podamos hacer la travesía», indicó Pomar. Además, animó a los trabajadores señalando que los establecimientos hoteleros son un producto que se vende, por lo que son necesarios. «Si están bien gestionados pueden ser viables, pero no sé si bajo las siglas de GPS o de otros», añadió.

En esta línea, el abogado apuntó que una suspensión de pagos o un proceso concursal «no debe asustar ya que es una vía para solucionar el problema». Además, continuó remarcando que, si está bien llevada, se puede «conseguir que se compren los hoteles».

Rafael Miguel también indicó que, durante la reunión con el administrador judicial, «no nos ha asegurado la viabilidad de la empresa y no creo que esté en condiciones de hacerlo». «Nos conformamos con que lleve bien la cosa y responda ante el juez con sus informes y que las empresas funcionen, al menos, hasta final de temporada», recalcó Miguel. Además, explicó que están buscando «aliados» para lograr el mismo objetivo, que es la «viabilidad de la empresa», y preparar las diferentes estrategias a seguir con el fin de poder defender los derechos de los trabajadores: «Estamos ilusionados porque todas las partes están apoyando la viabilidad de la empresa».

«No entendemos la postura de los hoteleros, cuando le han vendido hoteles»

El secretario general de la Federación de Hostelería del sindicato, Fernando Fernández, criticó ayer la postura de la Federación Hotelera ante toda la situación de GPS: «Tenemos el apoyo de todas las instituciones salvo de la Federación Hotelera, que no entendemos su postura cuando han sido elllos los que han vendido los hoteles». En esta línea, indicó que los hoteleros nunca han mostrado una denuncia referente a Grupo Playa Sol. «Es mentira que hayan denunciado nunca pero ahora se tiran como sapos», aseguró.

Buenas noticias, y no tan buenas, para los trabajadores

El secretario general de la Federación de Hostelería del sindicato, Fernando Fernández, anunció ayer que, tras varias reuniones con el administrador judicial, Javier Perelló, y tal y como también avanzó este periódico, las nóminas de junio serán pagadas antes del día 10. Ante esta buena noticia, los más de 100 trabajadores que acudieron a la asamblea aplaudieron con alegría. Además, Fernández también les explicó que en las próximas nóminas recibirán 500 euros para compensar los pagos atrasados que algunos empleados tienen. Por otro lado, el representante sindical indicó que, en octubre, se deberán cerrar algunas plazas irregulares y anunció que, tal vez se tenga que hacer un expediente de regularización de empleo, aunque confía que se podrán mantener «la mayoría» de los puestos de trabajo.

El hijo de Ferré ratifica que el responsable de la gestión empresarial era su padre

El Juzgado de Instrucción número 4 de Eivissa acogió ayer la declaración de Fernando Ferré Garnacho como imputado en el proceso y de otros tres testigos relacionados con la empresa. Al parecer Ferré Garnacho se ratificó con las declaraciones que ya hizo ante la Policía tras su detención asegurando que el responsable de la gestión empresarial era su padre. Los testigos, por su parte, apuntaron que existían pagos en negro y contratos laborales irregulares, según fuentes judiciales. Las declaraciones continuarán hoy.