Dos turistas observan desde un banco una marcha de piquetes en Sant Antoni.

Protestar, sí; pero trabajar, también. Con esta frase se podría resumir la jornada de huelga general que se vivió ayer en las Pitiüses. El esfuerzo sindical por movilizar a los trabajadores pitiusos resultó baldío y así lo reconocieron los propios convocantes, que rebajaron cualquier tipo de euforia al realizar el balance. Lejos de hablar de éxito, UGT y Comisiones Obreras se quedaron satisfechos con que el mensaje de la convocatoria hubiera calado entre la población.
Para las patronales y administraciones la mejor noticia es que apenas hubo incidentes, salvo los problemas en el servicio de recogida de basuras. En general, los piquetes fueron más informativos que coactivos, aunque, a la vista de los resultados, poco 'convencitivos'.
Los servicios mínimos funcionaron con total normalidad y los hospitales, colegios, aeropuerto y puerto no tuvieron problemas para operar con los criterios establecidos. El transporte tampoco se vio afectado y en los hoteles apenas tuvo repercusión.
La gran mayoría de comercios y mercados abrieron sus puertas y la gente acudió a elllos como si de un día cualquiera se tratara. En cuanto a los funcionarios, tras un año difícil en el que ya vivieron su propia huelga, la respuesta fue menor de la que cabía esperar. El seguimiento 'sólo' se hizo notar en el Ayuntamiento de Eivissa, con un 17%; y en la educación, con cerca de un 13%.
La jornada se cerró con una pacífica manifestación por las calles de Vila que reunió a cerca de un millar de trabajadores.

GUERRA DE CIFRAS

LOS SINDICATOS
Limpieza: 90%
(Suman la recogida de basuras y la limpieza viaria)
Hostelería: 50%
Educación: 24%
(En Primaria, un 26% y en Secundaria, un 23%)
Can Misses: 10%
Correos: 50%

LA PATRONAL
Comercio: 0%
(La mayoría de abrió sus puertas sin nadie de huelga)
Construcción: 20%

LA ADMINISTRACIÓN
Sanidad: 3,77%
Educación: 12,39%
Función pública: 5%