El Govern prevé en su proyecto de Presupuestos para 2012 introducir «fórmulas de externalización de determinados servicios» y pone como ejemplo la introducción de «convenios singulares u otras fórmulas de externalización en hospitales pequeños». Esta privatización de servicios afectaría a todos los hospitales de Balears menos a Son Espases, según confirmó una portavoz de la Conselleria, que matizó que se trata de un «objetivo» y que aún no se ha concretado nada para los hospitales de Can Misses y Formentera.

Este punto se incluye dentro de un apartado destinado a la «sostenibilidad y eficiencia» del sistema sanitario público de Balears, que también incluye «profundizar» en el uso racional de los medicamentos, «limitar» el número de asistencias técnicas y de proyectos de investigación y «delimitar» las prestaciones, fundamentalmente las farmacéuticas y las tecnológicas.

Subir precios

Entre los objetivos del Servei de Salut también está introducir «nuevas fuentes de ingresos», como el cobro de tasas para expedir la tarjeta sanitaria o subir los precios públicos para la prestación de servicios sanitarios. Esto último se refiere a lo que se cobra por aceptar pacientes de seguros privados.

Desde el Govern también prevén «desarrollar el nuevo acuerdo marco con los centros privados».

Asimismo, quieren controlar «rigurosamente» que se cumplen los presupuestos aprobados. De hecho, uno de los objetivos es «conseguir la eficiencia del modelo desde el punto de vista presupuestario a través de medidas de control del gasto, responsabilidad de los directivos, economías de escala, pactos de suministro y concursos corporativos».

También plantean preparar un plan de refinanciación de la deuda del Servei de Salut.

Otros modos de ahorrar que proponen desde el Govern es poner en funcionamiento una central de compras para «obtener mejores precios», centralizar la actividad administrativa de contratación y establecer «mecanismos de control de la actividad contractual de las gerencias».

Asimismo, queiren diseñar un sistema que permita controlar todos los consumos y «racionalizar el stock de todos los centros».

El hecho de que las obras del nuevo hospital Can Misses no aparezcan como tales en el presupuesto no significa que no haya partida para ello, ya que se trata de una concesión a una empresa que construye el edificio. Según indican desde Salut, se ha reservado una transferencia. «Eso está reflejado y contemplado», confirmaron.

Eliminan la oficina y la figura del Defensor dels Usuaris

La consellera de Salut, Carmen Castro, reconoció esta semana en el Parlament que los presupuestos suprimen la Oficina del Defensor dels Usuaris de la Sanitat Pública, que hasta ahora ha dirigido Pilar Sánchez como «medida de ahorro». Su coste anual era de 213.839 euros y en 2010 «solo tramitó 140 expedientes». En la misma comparecencia, Castro indicó que no pondrán en marcha «el céntimo sanitario, ni el copago». También descartó «recortar la cartera de servicios». Tampoco se modificará la política sanitaria para los turistas, que supuso un coste de 12 millones en 2010.

10 euros por la tarjeta sanitaria

Renovar la tarjeta sanitaria costará a partir de ahora 10 euros a los usuarios. Según explicaron desde la Conselleria, se trata de una tarjeta inteligente con chip electrónico que permite al paciente tener acceso a su historial clínico y a sus pruebas médicas de forma digital, con la posibilidad, por ejemplo, de imprimir pruebas como radiografías. «Esta tasa de 10 euros está pensada no para el coste de la tarjeta sino para el mantenimiento de todo este sistema», indicaron fuentes de la Conselleria.