Los sindicatos celebran mañana el Día Internacional de la Salud y la Seguridad en el Trabajo, una jornada que estará marcada por los posibles efectos que tendrá la reforma laboral sobre la salud de las personas que se han quedado sin empleo, así como las que continúan trabajando con modificaciones en sus condiciones laborales. Pedro José Linares Rodríguez, secretario de salud laboral confederal, y Agustín Gutiérrez, responsable de salud de CCOO en Eivissa y Formentera, analizaron ayer los posibles efectos del nuevo marco normativo laboral y de las medidas que se relacionan con éste en materia sanitaria, por ejemplo.

Efectos

«Los accidentes laborales son la mayor evidencia de una violencia estructural que se concreta en el seno de las empresas. En primer lugar, la reforma laboral culpabiliza al trabajador cuando reducir la siniestralidad ha sido siempre cosa de empresarios y trabajadores», explicó Rodríguez, quien aseguró, además, que el año pasado aumentaron los índices de incidencia (el número de accidentes por cada 100.000 trabajadores) en accidentes mortales en los sectores agrario (14 por ciento) y de la construcción (4 por ciento).

El primer problema derivado de la crisis, según explicaron, tiene que ver con las personas que han sido despedidas. «El desempleo tiene efectos importantes sobre la salud porque está haciendo avanzar problemas de carácter depresivo y de ansiedad. No sólo genera daños en la salud de quienes se han quedado sin trabajo sino también en los que se quedan en la empresa, que están sometidos a una mayor presión empresarial», explicó Rodríguez. Otra de las consecuencias que podría tener la reforma laboral, según CCOO, tiene que ver con el «darwinismo social». «Se podría generar un nuevo grupo social de exclusión social», pues según explicaron podría producirse la sustitución de trabajadores con enfermedades crónicas por sanos.

«La campaña del Govern culpabiliza al trabajador»
Agustín Gutiérrez, responsable de salud laboral de CCOO en Eivissa y Formentera, valoró ayer la campaña de reducción de siniestralidad laboral que impulsa el Govern para este año.
«Creemos que va encaminada a culpabilizar al trabajador cuando para reducir la siniestralidad laboral se necesita implicación de empresa y empleado. Además, reduce o mitiga las sanciones para las empresas y no se hace referencia a las enfermedades profesionales de las que el año pasado se detectaron 18.000 en España», concluyó.