El Instituto de Política Familiar de Baleares ha advertido de que en la actualidad un 40 % de los baleares está recibiendo algún tipo de ayuda por parte de su familia y ha reclamado a las instituciones de las islas que en 2013 acometan políticas que tengan en cuenta esta circunstancia.

La entidad considera que la crisis económica ha puesto de manifiesto el papel relevante de la familia por la solidaridad social que ha generado y ha instado en un comunicado a las administraciones de Baleares a llevar a cabo «políticas con perspectiva de familia, donde ésta sea el centro de la agenda política».

IPFB ha señalado que el núcleo familiar está asumiendo las dificultades de los parados, jóvenes y personas mayores, con ayudas que si se trasladaran a cargo de los presupuestos generales de la comunidad autónoma «no habría administración pública que lo resistiera».

El delegado de IPF en Baleares, Agustín Buades, ha instado al PP a cumplir en el Govern su programa electoral e «implantar una verdadera y eficaz política integral de apoyo a la familia en la legislación, en la economía, en la educación, en la sanidad, en la promoción social y en la comunicación».

La entidad solicita un Plan Integral de Apoyo a la Familia 2013-2017 del Govern con dotación presupuestaria, una ley de protección de la maternidad en Baleares, la puesta en marcha del Observatorio de apoyo a la familia que se creó mediante un decreto en mayo de 2006, y la del Consell sobre la infancia y la familia, creado por decreto en febrero de 2003.

También reclama una ley de conciliación entre trabajo y familia de las Baleares, la creación de una comisión de expertos sobre rupturas matrimoniales, la universalización de las ayudas fiscales a las familias, así como la recuperación del cheque escolar y la implantación de la zona única escolar.