La alcaldesa, en el centro, organizó un acto en el que se visitaron las instalaciones y se hizo entrega de placas y regalos.

Los gatos que han sido abandonados en Eivissa ya cuentan con un lugar donde quedarse mientras encuentran una nueva familia de adopción. Es en el Centro de Protección Animal de Sa Coma que ayer estrenó nuevas dependencias, entre las que se encuentran dos instalaciones cubiertas destinadas directamente para ellos.

Según explicó Paz Hernández, jefa del Área de Movilidad y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Eivissa, la idea ha sido «crear un lugar donde puedan jugar y donde puedan estar al sol mientras alguien se acuerda de ellos».

Sin embargo, los interesados han de esperar un tiempo puesto que ninguno de «estos grandes olvidados» ya ha llegado aún a su nuevo hogar y permanecen, tras ser esterilizados, en casas o fincas de acogida de voluntarios que forman parte de un programa puesto en marcha por el consistorio.

Por su parte, las otras reformas de Sa Coma si tienen que ver con los perros. Se ha construido un nuevo recinto para cachorros, que incluye una solera de hormigón con una zona vallada, tres espacios comunales con zona cubierta para albergar perros socializados y otro polivalente de mayor tamaño para adiestrar o albergar canes, se han reparado los marcos de los caniles y las cubiertas de los recintos exteriores y se están instalando cámaras y pavimentando la zona cubierta de los recintos exteriores, sustituyendo el tramo de tubería para el suministro de agua y podando las palmeras y arbustos del recinto. Y todo ello con una inversión de 16.398 euros.

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