La Conselleria balear de Salut ha confirmado lo que todos los vecinos de Sant Jordi ya conocían: «El agua que se suministra a este núcleo proviene de los pozos de ses Eres, los cuales se hallan salinizados». En un escrito enviado a los vecinos, Salut señala que «para mejorar la calidad y como medida de emergencia de carácter temporal se está utilizando la desaladora de ses Eres, aunque debido al elevado consumo, se ha de mezclar el agua desalada con el agua directa de los pozos, siendo la salinidad de la mezcla todavía superior a los límites establecidos pero, se consigue una mejora de las características organolépticas». Sin embargo, la Conselleria es tajante: «La calificación del agua sigue siendo NO apta para el consumo humano, no pude utilizarse para beber ni para preparar alimentos».

En la misma línea se expresa otra misiva remitida por Aqualia a los vecinos de San Jordi. Aún así, la empresa gestora del servicio de aguas en el municipio ‘josepí’ defiende que se está trabajando para mejorar las instalaciones y con ello la calidad del agua.

La Asociación de Vecinos de Sant Jordi ha sido convocada esta tarde para una reunión con responsables del Ayuntamiento de Sant Josep para tratar esta problemática. Es el encuentro que la agrupación había solicitado en diciembre, «para poder obtener la información necesaria y valorar qué actuaciones serán llevadas a cabo». Según los vecinos, el objetivo es «solucionar definitivamente el problema actual».