Escaso, así puede definirse el seguimiento de la jornada de huelga convocada por el Sindicat d’Estudiants dels Països Catalans (SEPC), en favor de una universidad pública gratuita, de calidad y en catalán y contra la LOMCE Al menos esa fue la impresión generalizada, ya que ni desde la entidad convocante ni por parte de la Conselleria d’Educació o la Universitat se aportó ninguna estimación concreta del seguimiento. Desde Educació se argumentó que nadie les había comunicado de forma oficial la convocatoria de la huelga, por lo que no se activó el sistema de seguimiento. Jaume Mateu, portavoz del SEPC, esgrimió que «se ha movilizado a menos gente porque no ha llegado la información a todo el mundo y en algunos institutos se han puesto exámenes». Además, en una veintena de centros era día no lectivo.

La huelga había sido convocada en Secundaria y Universitat en unas 26 ciudades del territorio de habla catalana. En Palma varias decenas de alumnos del SEPC habían protagonizado el día antes un encierro en el edificio Ramon Llull del campus, un recinto que ayer amaneció con algunas pintadas, unos cajeros automáticos rotos y diversas barricadas en los accesos, una acción que fue criticada por Joves Estudiants de les Illes Balears, la asociación mayoritaria en el Consell d’Estudiants de la UIB, que también denunció la interrupción de algunas clases.

A mediodía alrededor de 300 estudiantes recorrieron el centro de Palma tras la pancarta ‘Contra su prepotencia, decidimos desobediencia’, y lanzaron consignas en contra de los recortes en educación y del sistema capitalista.