Pilar Marí, Vicent Serra y Alberto Pons durante la presentación del proyecto portuario.

El presidente de Autoritat Portuària, Alberto Pons, se trasladó ayer hasta Eivissa para dar a conocer los detalles del proyecto de la remodelación de la fachada marítima, que la institución mostraba el pasado sábado a través de su página web. En relación al proyecto, Pons reiteró que una vez se acometan las obras, que tienen un presupuesto de ocho millones de euros, Eivissa pasará a tener «el mejor puerto deportivo de todo el Mediterráneo». «El futuro de este puerto estará a la altura de los líderes del Mediterráneo, si no lo es ya, pero, francamente, este paseo y este espectáculo de los megayates será inigualable en cualquier otro puerto del mundo», indicó.

El presidente de Autoritat Portuària salió al paso de las críticas de vecinos y comerciantes referidas a la eliminación de los aparcamientos y aseguró que la mejora de la zona portuaria «exigía ciertas decisiones y estas decisiones se basan en la peatonalización y en la dulcificación de la zona». Aún así, explicó que esta peatonalización conlleva ciertas excepciones «necesarias» para dar servicio y, por tanto, se dará acceso a los vehículos públicos de emergencia y abastecimientos así como a los usuarios de las marinas y cruceristas. «Entiendo que la servidumbre de peatonalizar una zona puede afectar a ciertos comercios, pero se gana en unas cosas y se pierde en otras. Desde luego, no podemos dar cabida a todos los conceptos y hemos tenido que apostar por uno de ellos, pero estoy convencido de que será una zona de absoluta atracción que el cliente sabrá apreciar y disfrutará», aventuró.

La alcaldesa de Vila, Pilar Marí, por su parte, indicó que el deseo era que la zona portuaria «fuera más amable, peatonalizada y recuperada para la ciudad». Al ser cuestionada sobre si estos aparcamientos serán recuperados en otra zona, Marí indicó que con la habilitación de 124 plazas anunciadas en la avenida de Santa Eulària «suplimeros la falta de aparcamiento allí» y anunció la búsqueda de nuevos parkings disuasorios: «Lo que queríamos todos era que no se estacionara y que fuera un puerto peatonal al máximo y poder ofrecer unos servicios mínimos a los pasajeros», remató.