Pilar Marí atiende a los medios tras salir de la sede del Ayuntamiento de Vila. | (c) Sergio G. Canizares

Los cuatro ediles defenestrados por el presidente del PP balear, José Ramón Bauzá, formalizaron ayer las respectivas renuncias a sus cargos ejecutivos y a sus actas de concejales. Fue la presidenta de la junta local de Vila, Carmen Domínguez, la que se encargó de depositar los documentos en el Consistorio. Tras este trámite, la todavía alcaldesa Pilar Marí; el primer teniente de alcalde Joan Mayans, el regidor de Urbanismo Alejandro Marí y el de Turismo, Rai Prats ya son historia para en el Ayuntamiento.

Los cuatro firmaron las citadas renuncias en el transcurso del comité de dirección insular del pasado martes, obligados por el propio Bauzá. El escándalo generado por los whatsapp en los que conspiraban contra sus compañeros y criticaban a los líderes del PP y la rueda de prensa que los tres regidores convocaron sin permiso del partido para pedirle a Pilar Marí que no dimitiese.

Tras la formalización de su renuncia, Rai Prats destacó que se abre «un periodo de transición» en la búsqueda de nuevo alcalde y aclaró que entiende la decisión que tomó el PP al obligarlos a dimitir, pero precisó que: «Entiendo la decisión del partido, siempre he estado en él, pero lo que no respeto es las declaraciones que se han hecho referentes a nuestra persona cuando nos fuimos de manera voluntaria». Por su parte, la todavía alcaldesa Pilar Marí afirmó ayer cuando abandonaba el Ayuntamiento que el pleno de renuncia se celebrará el lunes y que, además, estudiará su continuidad en el PP o no: «Lo tengo que pensar», apuntó, pero no quiso entrar en más detalle.