Pepita Gutiérrez y Pepe Sala en una foto de archivo. | ESTEVE FRANQUESA

Pepita Gutiérrez ha dado el paso. El lunes por la noche comunicó al comité electoral del PP de Sant Antoni su intención de repetir como candidata a la alcaldía.

Lo hizo a sabiendas de que los partidarios del exalcalde y actual senador, Pepe Sala, tienen mayoría tanto en la junta local como el mencionado comité electoral y que están buscando desde hace meses un alcaldable de su cuerda. Los ‘salistas’ no quieren que Gutiérrez repita como ‘número uno’ de la lista municipal y en varias ocasiones han expresado públicamente su convencimiento de que «puede haber mejores opciones» para conservar la mayoría en el ayuntamiento portmanyí. El último en verter esa opinión fue Joan Pantaleoni, precisamente presidente de la junta local; lo hizo en Radio Ibiza hace algunas semanas. Aun así, el nombre que puede haber detrás de ese candidato alternativo todavía no ha trascendido.

Discrepancias

Las desavenencias entre Gutiérrez y los ‘salistas’ vienen de lejos. La alcaldesa dio apoyo a Vicent Serra en el último congreso del partido en Eivissa, en el que el actual presidente del Consell se impuso a Pepe Sala por una veintena de votos. Son gestos que han dejado huella y que han tenido consecuencias. En 2013, por ejemplo, Gutiérrez y su equipo aprobaron una ordenanza que obligaba a los locales de ocio del West End (la zona de ‘marcha’ de Sant Antoni) a adelantar en una hora el cierre (a las 5h. en lugar de las 6h.), decisión que provocó las quejas de Pantaleoni. Por otra parte, durante la polémica sobre la campaña que lanzó el Consulado británico para advertir a los turistas de los peligros que entraña salir por la noche en Sant Antoni, los ‘salistas’ fueron muy críticos con el Consistorio por secundar esas advertencias. De hecho, Sala llegó a responsabilizar directamente a la primera edil de crear alarma.

La precandidatura de Gutiérrez, que tiene el apoyo tácito del propio Serra, supone todo un desafío en el proceso de elección de candidatos municipales que está viviendo el PP, que por cierto ya ha sufrido dos dilaciones: una a propuesta de los propios ‘salistas’ y otra a petición del alcalde de Santa Eulària, Vicent Marí, que aun debe decidir si quiere optar a la reelección. La última fecha ‘límite’ que se ha apuntado desde la junta insular de la formación para la proclamación de los alcaldables no deja de ser algo vaga: «Antes de Navidad».