La Asociación de Afectados por la Cantera de Ses Planes ha anunciado que, de aprobarse la planta de hormigón y asfalto proyectadas en Jesús, harán responsable de cualquier consecuencia lesiva que provoque la planta a las personas que, conociendo la peligrosidad del proyecto, decidieron apoyarlo.

«Nos parece abominable el presunto juego que se está llevando a cabo con todo lo que tiene que ver con la cantera de ses Planes. Por ello, esta mañana antes de la reunión del subcomité hemos presentado un escrito en la Comisión Balear de Medio Ambiente solicitando explicaciones sobre esta ratificación y sobre todos los puntos que siguen en el aire y que no nos aclaran», ha señalado el presidente de la Asociación, Angel Nieto.

Según han informado desde la Asociación, el representante técnico del Consell de Eivissa en el subcomité ha mostrado su preocupación y ha reprochado a los representantes de la empresa promotora que ellos mismos hubieran anunciado públicamente su renuncia a la planta asfáltica y que ahora, den marcha atrás.

Ahora, la ratificación del proyecto deberá ser sometida a aprobación final en el pleno de la Comisión Balear de Medio Ambiente, en la que cuentan con representación política tanto el Ayuntamiento como el Consell.

La Asociación, como ha añadido su presidente, sólo ha buscado que no se lleve a cabo el proyecto, presentando todas las iniciativas administrativas y legales necesarias.

«Nos hemos reunido con todas las administraciones implicadas. No hemos querido hacer ruido con estas reuniones, como se nos solicitó en numerosas ocasiones desde las instituciones y así lo hicimos, pero viendo el cariz que está tomando la situación, anunciamos a nuestros políticos que la Asociación va a utilizar todos los recursos a su disposición para parar esta «locura» medioambiental», ha explicado Nieto.

Nieto ha dicho además que cuando el alcalde de Santa Eulària, Vicent Marí, salió a declarar que no iban a llevar adelante la planta asfáltica, «podía ser consciente del juego de los empresarios y se utilizó como una cortina de humo para calmar los ánimos de los vecinos».