El presidente de APB, Alberto Pons, presentó ayer en Eivissa el anteproyecto de la nueva estación marítima.

El presidente de Autoritat Portuària de Balears (APB), Alberto Pons, presentó ayer en Eivissa el anteproyecto de la nueva estación marítima para el tráfico entre los puertos de Vila y la Savina, cuya entrada en funcionamiento se espera para 2016 y se situará en el muelle comercial del puerto ibicenco (muelles Ro-Ro Norte y Poniente).
Una ubicación alejada del centro de la ciudad y que en su día provocó rechazo de los formenterenses. Sin embargo, la APB ha propuesto varias alternativas –no exclusivas– para conectar la futura estación marítima con Vila. La más novedosa es un barco-taxi, que podría acercar a los pasajeros hasta es Martell (en la Marina) o en el muelle donde ahora atracan las embarcaciones que realizan el trayecto entre las Pitiüses. La otra opción, por la que en principio apuesta la APB, sería un enlace con autobús hasta la actual estación marítima. En esta zona se emplazará una marina que se sacará a concurso.
El presidente de APB, Alberto Pons, destacó que su objetivo es conseguir un proyecto «consensuado» con todos los agentes implicados, por lo que les emplazó a que aporten sus ideas hasta el primer trimestre de 2015 porque «ahora es el momento de opinar». Pons aseguró que, a petición deL presidente formenterés, Jaume Ferrer, también presentarán en enero este anteproyecto en la menor de las Pitiüses. El tráfico anual entre Eivissa y Formentera es de 1,5 millones de pasajeros.
Características
La superficie de la nueva estación abarcará unos 30.000 m2, cuyos espacios se unirán mediante pérgolas de 4,5 metros de altura bajo las que se podrán colocar edificios independientes con fachadas de cristal, que suponen «un impacto visual menor». También está prevista la construcción de dos parques infantiles y numerosas zonas verdes, así como espacios comerciales en la misma estación. «Quiero desterrar la idea de estación marítima como el lugar en el que sólo compras el tíquet y esperas, y encauzarlo hacia el concepto aeroportuario», comentó Pons.
También se prevé la construcción de tres nuevos pantalanes que permitan el amarre simultáneo de hasta diez embarcaciones. La previsión de la APB es invertir entre 6 y 7 millones de euros, aunque no descartan la iniciativa privada, que para Pons «supondría un ahorro para el contribuyente».