La Agrupació de Dones Progressistes leyó el tradicional manifiesto en Vara de Rey, con una batucada previa y otra posterior.

Amén de otros actos más lúdicos o deportivos, como la Cursa de Dones, Eivissa celebró el Día de la Mujer con otras citas de mayor tinte reivindicativo, al menos simbólicamente, como el que protagonizó por la mañana la alcaldesa Virginia Marí en la fuente de la plaza Enrique Fajarnés o la tradicional lectura del manifiesto a cargo de la asociación de Dones Progressistes d’Eivissa, que tuvo lugar en el paseo de Vara de Rey sobre las 18:00 horas.

Fuente teñida

En el primer caso, se trataba de un acto organizado por el Ayuntamiento de Eivissa y Aqualia, en el cual Virginia Marí posó, junto al director de la delegación balear de la compañía de aguas, Eduardo del Castillo, frente a la citada fuente, teñida de un tono morado para la ocasión.

Técnicos de la compañía añadieron un aditivo alimentario al circuito cerrado de la fuente para que durante todo el día rindiera este particular homenaje a todas las mujeres, en un novedoso acto que surgió de la empresa de aguas, según señaló Del Castillo.

«Es un día muy importante para reivindicar el papel de la mujer porque es un reconocimiento a todas las mujeres, que somos un poco motores de la sociedad, aunque lo ideal sería que no se tuviera que celebrar porque significaría que se ha alcanzado la igualdad», manifestó Marí.

La morada estampa se produjo hacia las 11 de la mañana, con la alcaldesa vistiendo una sudadera de color rosa, ya que seguidamente se disponía a participar en la Cursa de la Dona, que preveía recorrer caminando.

Antes de partir, la alcaldesa tuvo tiempo de atender amablemente a dos vecinos que le exponían una queja. Tras comprometerse a realizar al día siguiente (hoy) las gestiones oportunas para tratar de resolver el caso que le exponían, se despidió para participar en la prueba deportiva.

Manifiesto

Por la tarde, unas 120 personas acudieron al paseo de Vara de Rey para participar en el acto organizado por Dones Progressistes d’Eivissa.

El evento se inició y finalizó con una batucada a cargo de un grupo de mujeres vinculadas a la entidad encargadas de animar a los presentes.

Inicialmente había unas 60 personas, pero su número fue creciendo conforme sonaban los tambores hasta sobrepasar el centenar.

La presidenta de la entidad, Beatriz Torreblanca, leyó un manifiesto en el que censuró los recortes de presupuesto en las áreas dedicadas a la mujer y a la igualdad y el recorte de derechos en educación y libertad sexual y reproductiva.

El público -con una mayoría de mujeres pero con una notable presencia de hombres, y con algunas caras conocidas de las fuerzas de izquierda de la isla- sonrió cuando Torreblanca dijo que debía recuperarse el espíritu reivindicativo de esta jornada, que señaló se había «trivializado» y convertido «en una especie de San Valentín».

En un mensaje similar al de otros años, la activista feminista pidió «estar alerta» a la complicidad con «el sistema patriarcal, sexista y machista». «Ojo y autoestima» reclamó a las mujeres y «un esfuerzo extra» a los hombres.