Enmarcado en el programa de actos con motivo de las Fiestas Patronales del municipio, este evento musical y festivo atrajo a la localidad a un importante número de personas de todas las edades con muchas ganas de pasárselo bien y de disfrutar cantando y bailando hasta altas horas de la madrugada.
Pelucas a lo afro y largas melenas lisas, enormes gafas, collares y cintas con flores, pantalones de campana y vaporosas faldas, abalorios multicolores y llamativas vestimentas, se fundieron en un totum revolutum a medida que la gente iba congregándose en multitud en Sant Josep.
La fresca noche del sábado comenzó a adquirir pronto temperatura, elevándose y caldeándose por momentos el ambiente en la plaza de la iglesia.
En el escenario, los cinco integrantes de The Bon Scott Band, sacudieron con su potente sonido rockero a todos los presentes, ofreciendo un memorable concierto como tributo a los míticos AC/DC.
La contundencia del grupo bajo los focos del escenario, con sus ritmos frenéticos, con sus poderosos y metálicos solos de guitarra eléctrica, y su particular estilo de hacer rock duro al más puro estilo de la veterana banda australiana, consiguió que nadie permaneciera impasible con la actuación.
The Bon Scott Band, se metió de inmediato al público en el bolsillo y supo alcanzar una clara complicidad con los asistentes que se prolongó durante la hora y media de actuación que duró el concierto, tras varios amagos de retirada que culminaron con el legendario ‘Highway to Hell’.
Luis, Juan y Felipe, un grupo de treintañeros procedentes de Salamanca, recién llegados con sus parejas a Eivissa esa misma tarde, se mostraron cariacontecidos con todo lo que estaban viviendo, y destacaron entusiasmados que «no teníamos ni idea de que esto se podía poner así. Esto es una pasada. La decoración está genial y vaya conciertazo que nos han regalado con este grupo de rock. Cerrabas los ojos y parecían los auténticos AC/DC».
Así las cosas, pasada la una y media de la madrugada, con el ánimo de los presentes por las nubes y con una creciente agitación por seguir alargando al máximo la diversión, los metálicos sonidos de The Bon Scott Band cedieron todo el protagonismo a la música retro de manos de los Dj´s Pharma y Javi Box. Cada pincha con su particular estilo, fue proponiendo un repertorio musical de diferentes tendencias, en el que no faltaron algunos de los clásicos de las décadas de los 60, 70 y 80, que fueron muy bien acogidos en la pista de baile, y con los que mantuvieron en constante movimiento a los flowerers hasta pasadas las cinco y media de la mañana.
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