Según informa el Consel de Eivissa, esta institución cederá un espacio en el recinto de sa Coma para estacionar los vehículos y habilitará otro con capacidad para alojar a 50 personas.
El objetivo de esta dotación y de este nuevo espacio es conseguir que el tiempo de respuesta de la UME, en el caso de que se produzca una emergencia en Eivissa, quede reducido a dos horas y media, que es el tiempo que se calcula que se necesita para movilizar el personal y transportarlo a la isla en helicóptero desde su base en Bétera (Valencia).
«Era una solución que hacía tiempo buscábamos, a raíz de la experiencia que hemos tenido con algunos incendios forestales muy graves», ha explicado el presidente del Consell ibicenco, Vicent Serra.
Esta decisión se ha acordado en una reunión que se ha celebrado esta mañana en Eivissa, y a la cual han asistido, además de Serra, la Delegada del Gobierno en las Islas Baleares, Teresa Palmer; el conseller de Administraciones Públicas, Juan Manuel Lafuente; el vicepresidente del Consell insular, Mariano Juan; la consellera insular de Medio Ambiente, Pepa Costa; el director insular de la Administración General del Estado, Roger Sales, y representantes de la UME y la Dirección general de Emergencias de las Islas Baleares.
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