C. AlcántaraEivissa23/06/15 0:00
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Las Pitiüses necesitan duplicar su plantilla de inspectores de educación ya que sólo cuentan con dos. Ésta es una de las propuestas que la delegada territorial de Educación en funciones, Belén Torres, dejará por escrito para la próxima legislatura. «Las infraestructuras educativas han aumentado y nos hace falta aumentar la plantilla de inspectores», dijo ayer Torres, que aseguró, además, que esta petición no es porque haya más problema de convivencia. Eivissa contaba con tres inspectores, pero uno de ellos renunció a su plaza hace dos años por motivos personales, una vacante que no se ha cubierto. Un inspector de Educación supervisa el buen funcionamiento de los centros, asesoramiento o tomar medidas ante un docente. «He trabajado muy bien con ellos como asesores. Conocen muy bien la normativa», dijo Torres.

Otra de sus propuestas es «seguir reduciendo las ratios en los centros, las he bajado y he abierto el camino para que se siga trabajando en esa línea», así como «más recursos de profesorado, material informático, mobiliario». Hay menos profesores de secundaria por el aumento del horario, «pero hay más infraestructuras y hacen faltan más recursos» y recordó que aumentó «los auxiliares técnicos educativos y los profesores de Pedagogía Terapéutica». También propone consolidar los ciclos formativos de grado medio y completar la oferta del Conservatori y la Escuela Oficial de Idiomas. En materia de infraestructuras considera prioritario un nuevo instituto en Eivissa que dé cabida a la Escola d’Arts, dos nuevos colegios en Santa Eulària y Cala de Bou, así como una nueva sede de la EOI y de carácter provisional, hasta que no disponga de una sede, una extensión en Quartó del Rei, como la que se hizo en Sa Serra; la segunda fase del Quartó del Rei con la inclusión del ciclo Náutico Pesquero. También considera imprescindible «más recursos y autonomía para la delegación; la hemos suplido con mucho trabajo» y agradeció «la sensibilidad que Palma ha tenido y la colaboración del Consell y los ayuntamientos».

Respecto al TIL, comparte el objetivo de dar más competencias lingüísticas en inglés, «pero la manera de implantarlo no fue la adecuada; se apretó demasiado el acelerador».

Torres, que volverá a la docencia al colegio de Santa Gertrudis, dejará por escrito estas propuestas. «Después de haber trabajado cuatro años y donde hemos conseguido cosas buenas, pienso que hay que seguir esa línea».