El cantante, en un momento de la presentación en Eivissa de su último álbum. | Arguiñe Escadón

Apenas una tercera parte del estadio de Can Misses se llenó anoche. Alejandro Sanz no completó ni una tercera parte del aforo, aunque se lo tomó con mucho humor: «Hay mucha gente que está en la playa y cuando recojan la toalla me han dicho que vienen aquí», bromeó. «Nosotros vamos a hacer que esta noche sea única, así que ‘parriba’ y ‘palante’», animó el artista, que demostró así su profesionalidad y talante. El maestro recordó que hacía 20 años que no daba un concierto en Eivissa y no dio importancia a la parte vacía del estadio, centrándose en los asistentes de las primeras filas.

Sanz empezó con canciones de su nuevo álbum, Sirope, y, cuando empezó con clásicos como Desde cuando, de Paraíso exprés, o Quisiera ser, de El alma al aire, el público presente le lanzó una gran ovación. No hubo mucho, pero, eso sí, se entregó al máximo con el artista, que estaba acompañado de una decena de músicos.

El concierto se enmarcaba dentro del programa Estiu Jove 2015 que organizan el Consell, el Ayuntamiento de Vila y dos empresas. La próxima cita del programa será el concierto de Pablo Alborán, que actuará el próximo día 20 del presente mes, también en Can Misses.

Alejandro Sanz presentó su último trabajo, Sirope, el décimo álbum de estudio del cantautor español, que salió al mercado el pasado 4 de mayo. El disco se grabó en Miami y en él han participado músicos como Davey Faragher, Sal Cuevas, David Levita, Arturo Sandoval, las voces de Chabuco, Sara Devine, Natasha Dueñas, Irene Díaz y Belén Zeta.