El Consell de Eivissa ha rechazado hoy mediante un informe negativo dos proyectos presentados por Empresas Matutes el pasado 30 de abril ante la Comisión de Medio Ambiente del Govern balear que forman parte de su Plan de Excelencia para Platja d'en Bossa.

Las conselleras Pepa Marí y Viviana de Sans han dado hoy cuenta de este acuerdo del Consell Executiu, que muestra la oposición de la institución insular a la propuesta empresarial para la construcción de instalaciones deportivas en una parcela de 24.000 metros cuadrados y de un aparcamiento en otro solar de 52.000 metros cuadrados, ambos en la Platja d'en Bossa.

Según ha explicado Pepa Marí, estos dos proyectos, que se han tramitado de forma independiente, deben realizarse de forma unificada y someterse a «un único estudio de impacto ambiental».

«Se trata de una actuación en 75.000 metros de suelo rústico y entendemos que no se puede tramitar por separado», ha señalado Marí, quien ha asegurado que este «macroproyecto» carece aún de informe de impacto medioambiental, territorial y económico.

Marí ha aclarado que el informe del Consell no es vinculante, pero ha recordado que estas parcelas están ubicadas en suelo rústico y que, por tanto, necesitarán una declaración de interés general, que es competencia de la institución insular.

Por lo tanto, «la última palabra la tiene el Consell», ha señalado la consellera.

Pepa Marí también ha asegurado que con el nuevo equipo de gobierno de PSOE y Podem-Guanyem en el Consell, las prioridades son «otras» y ha cuestionado que el anterior equipo de gobierno no hubiera tramitado esta consulta de la Comisión balear de Medio Ambiente.

«No vemos con buenos ojos este proyecto porque Platja d'en Bossa debe ordenarse con criterios de interés general en lugar de crecer urbanísticamente con intereses lucrativos y privados», ha dicho Marí.

El proyecto presentado por Fiesta Hotels & Resorts contempla la construcción de una parcela de 24.000 metros cuadrados para instalar un edifico de 668 metros cuadrados destinado a vestidores, cafetería, oficina y almacenes.

La propuesta también incluye la instalación de una caseta para oficina de turismo y Guardia Civil, una pista de pádel de competición, otras 14 pistas de pádel normales, dos pistas de tenis, dos piscinas, un campo de fútbol y una pista de baloncesto.

La construcción del aparcamiento se proyecta en otra parcela de 52.000 metros cuadrados, y su capacidad prevista es de 1.864 vehículos.

El Consell Executiu también ha informado sobre el proyecto de ampliación del aeropuerto que promueve AENA, que prevé la construcción de una nueva plataforma de aviación general de 80.000 metros cuadrados y la demolición de los elementos etnográficos abandonados tras la expropiación de los terrenos, una actuación a la que el Consell de Ibiza se opone.

En concreto, la propuesta prevé la adecuación de parcelas expropiadas en la zona en 2012, y la demolición de estas edificaciones «abandonadas» como son tres casas payesas, un molino, cuatro «safarejos», dos norias, canalizaciones y bancales.

Sin embargo, la consellera Viviana de Sans ha explicado que el informe que ha realizado el técnico del departamento de Cultura y Patrimonio «considera que las razones que esgrime AENA para arrasar este espacio de 16 hectáreas es muy vago y está poco argumentado».

De esta forma, el Consell apuesta «para conservar in situ todos estos elementos que se quieren eliminar».

«Consideramos que no existe ninguna justificación para la demolición de este conjunto de elementos etnográficos, y el que lo que hace falta es conservarlos, rehabilitarlos y ponerlos en valor. La destrucción patrimonial es completamente incompatible con el modelo territorial y turístico que defiende este ejecutivo, y que apuesta por un turismo más respetuoso con su entorno natural y cultural», ha manifestado De Sans.