La bandera roja en Talamanca incrementa la indignación vecinal. | Núria Arias/ Roger Riera

Tras todo un fin de semana con la bandera roja ondeando al viento de la bahía de Talamanca, debido a la contaminación del agua del mar por la reciente rotura del emisario de aguas residuales, la indignación y el malestar de vecinos, empresarios y visitantes ha ido en aumento por instantes ante una situación que algunos han llegado a calificar de «tomadura de pelo».

En este sentido, el presidente de la Asociación de Vecinos de Talamanca, José Colomar, reconoció ayer que «vamos a hacer lo posible para que la reparación de este problema se declare actuación de emergencia, porque motivos hay más que suficientes para que sea considerada así».

«Creo que tanto el Ayuntamiento de Vila como el Consell d’Eivissa deberían pronunciarse de una vez en favor de una solución inmediata para este problema. Deben ponerse del lado de los ciudadanos e instar al Govern Balear para que actúe rápido y tome las medidas necesarias para acabar con todo este asunto. Ya está bien de que los políticos solo nos vendan humo», explicó el presidente de la asociación vecinal.

Asimismo, José Colomar señaló que «esta situación no se puede seguir aguantando. Talamanca está soportando un gran perjuicio desde hace no ya unos meses, sino desde hace ya muchos años y seguimos igual. Han pasado tres legislaturas distintas y, en cuanto llueve, estamos otra vez con el mismo problema porque el tubo del emisario está obsoleto, totalmente podrido y se rompe».

«Esta situación es una pena porque los datos de ocupación en estas fechas siguen siendo muy buenos, hace buen tiempo y estamos dando una mala imagen para todos los visitantes, no solo ya de la playa de Talamanca, sino para la isla entera», añadió Colomar.

Por tal razón, el presidente de la asociación de Vecinos de Talamanca, en nombre de la junta directiva, expresó su intención de «presentar una denuncia contra la Conselleria de Medio Ambiente por delito medioambiental continuado. Nos hemos marcado el 30 de octubre como fecha tope para presentar la denuncia si no hay antes respuesta y una solución a este grave problema, que afecta no solo al agua del mar, sino a los seres vivos y a la salud de las personas».