Imagen de un edificio en construcción situado en Eivissa. Foto: DANIEL ESPINOSA

Las Pitiüses han experimentado durante el último año un importante incremento de la inversión en construcción, tal y como demuestran los últimos datos de la Asociación de Constructores de Balears. De enero a septiembre de este año, la inversión total en edificación privada, que engloba todos los proyectos de construcción de viviendas, turismo, reformas y no residencial, fue de 177,6 millones de euros, lo que supone un incremento del 71% respecto al mismo periodo del año pasado, cuando la cifra de inversión alcanzada fue de 103,8 millones, según los datos ofrecidos por la patronal del sector en Balears. No obstante, el volumen de inversión se ha contraído durante los meses de verano en las Pitiüses, ya que entre enero y mayo la cifra alcanzaba los 105,4 millones, un 96% más que durante el mismo periodo del año anterior.
El desglose de los datos pone de manifiesto que el mayor crecimiento se encuentra en la rama residencial (edificación residencial, viviendas de nueva planta y reformas con proyectos), que pasa de los 71,2 millones a los 136,4 millones en los nueve primeros meses de este año, lo que supone un incremento del 91,6%. Durante los cinco primeros meses del año la subida alcanzaba el 125,2%, lo que redunda en un retroceso en la inyección destinada al sector durante la temporada alta.
Desde la Asociación de Constructores de Balears destacan que las viviendas de nueva planta han pasado de 168 en los nueve primeros meses de 2014 a 260 este año, mientras que el número de reformas de viviendas con proyectos han pasado de 18 a 68, datos que para la patronal explican el crecimiento de la edificación residencial.

La inversión en turismo (planta hotelera y alojamientos vacacionales) aumenta un 40,5% pasando de los 18,1 millones contabilizados hasta septiembre del año pasado a los 25,5 millones de este año. En la rama no residencial (supermercados, naves industriales...) se ha experimentado en las Pitiüses un crecimiento del 8%.

Para el director general de esta asociación, Manuel Gómez, las reformas hoteleras y no residenciales «empiezan a tener un recorrido más corto» en Eivissa y Formentera ya que, como recuerda, «hubo años en los que se hicieron bastantes cositas, pero la población no ha aumentado tanto».

Competencia desleal

A pesar del incremento de la inversión, Manuel Gómez advierte de que «sigue sin haber trabajo para todo el mundo, como demuestra el hecho de los precios a los que se contratan algunas obras, muy a la baja». Según el director general de Constructores de Balears, los empresarios pitiusos se quejan «de la competencia» que están sufriendo de empresas «que vienen de la costa levantina», que llegan a las islas «con sus propios trabajadores y convenios, con costes laborales más bajos y con precios con los que es difícil competir». «El tejido empresarial ibicenco tradicional lo está pasando mal», afirma Gómez, quien reitera que «hay mucha competencia desleal, no ilegal, en el sector». «Si me traigo gente de la península a la que aplico el convenio de Alicante, alquilo un apartamento y meto a nueve personas ahí y luego trabajan 8 o 10 horas por las que supuestamente cotizan por 6 hay una competencia desleal e irregular con la que es difícil competir», denuncia el responsable de la patronal, quien concluye situando el volumen actual de inversión en construcción en las Pitiüses al nivel de los años «2010 o 2011», pero lejos de los ejercicios anteriores a la crisis.

LA NOTA

Más viviendas visadas, pero no como antes de la crisis

En edificación de vivienda libre, los datos de este año demuestran que ha crecido un 132,51% en el conjunto del Archipiélago de enero a julio. Aún así no están a los niveles de los años anteriores a la crisis. En 2007 se visaban en Balears más de 12.000 viviendas. Ahora la cifra de los siete primeros meses del 2015 llega a 1.323 viviendas en Balears. Si lo desglosamos por islas vemos como en Mallorca se han visado 898 viviendas libres (un 117% más que el año anterior); la cifra en Menorca es de 130 (un 261% superior a 2014) y en las Pitiüses han sido 295, lo que supone un incremento del 143%. Gómez aclara que estas viviendas visadas suelen ser viviendas unifamiliares, lo que demuestra que los ciudadanos vuelven a tener más solvencia económica. Aún así, la construcción de viviendas plurifamiliares es todavía un “espejismo”, asegura el director general.