Cubierta por medio metro de posidonia, la playa de Talamanca amanecía ayer desdibujada después del fuerte temporal que, con vientos de hasta 80 kilómetros por hora, sacudió el lunes la isla de Eivissa.

Muchos eran los curiosos que ayer se acercaron hasta aquí para fotografiar la apocalíptica imagen de la playa, donde impresionaba ver las embarcaciones todavía varadas en la arena. La pasarela que la atraviesa estaba en algunos tramos desaparecida, hundida por la fuerza del viento y sepultada bajo un mar de posidonia.

Al día siguiente del temporal, los trabajadores de los restaurantes se daban prisa por borrar los efectos del temporal. Los establecimientos más afectados fueron los situados en la zona central de la bahía. Juan Marí, maître del Hostal Talamanca, contaba con todo detalle cómo vivieron las horas posteriores: «El agua del mar rodeaba todo el local y la gente no podía entrar. Por dentro también estábamos completamente inundados con medio palmo de agua y la terraza estaba llena de algas».

El restaurante no pudo abrir el lunes al público hasta bien entrado el mediodía y, según Marí, las pérdidas por ello alcanzaron entre los 3.500 y los 4.000 euros. «Además, como era un día festivo habíamos reforzado el personal porque esperábamos más gente que un lunes normal», añadió.

También Jean Pierre Vivares, propietario del bar Flotante, se lamentaba por las pérdidas causadas por el temporal. El lunes no pudieron abrir y ayer la terraza todavía no estaba habilitada porque el agua del mar la seguía cubriendo.

Ambos se quejaron de que no hubiera mayor presencia de operarios municipales arreglando los destrozos. «Lo hemos arreglado todo nosotros, nadie ha venido a ayudarnos. Encima no podemos retirar la posidonia porque nos denunciarían», señaló Marí. El dueño del Flotante, por su parte, aseguró que el lunes la calle que discurre paralela a la playa y el aparcamiento estaban inundandos y «nadie vino para quitar el agua».

Sin embargo, desde el Ayuntamiento de Vila explicaron que el operario que limpia la playa acudió ayer a las 6 de la mañana para recoger la abundante basura que la fuerza de las olas arrastró hasta la orilla y entre la que se llegó a encontrar incluso un microondas.

Los técnicos municipales han decidido esperar a que amaine del todo el temporal para retirar la posidonia, aunque no en su totalidad dado que esta planta protege la arena y evita que un nuevo temporal se la lleve. El ayuntamiento revisará por otra parte los árboles de la ciudad y ya ha retirado los ejemplares abatidos por el viento.

LA NOTA

Nuevas pasarelas para Eivissa y Formentera

Hoy está previsto que empiecen los trabajos para desmontar la pasarela de la playa de Talamanca, que será sustituida por una nueva que estará lista el próximo 15 de diciembre. En total, 865 metros de pasarela nuevos a través de una inversión de 600.000 euros del gobierno central.

Formentera también estrenará nuevas pasarelas en las playas de ses Illetes, es Pujols y es Caló con un presupuesto de un millón de euros.

Por otra parte, el temporal ha dañado gravemente las pasarelas de ses Figueretes y Platja d’en Bossa, por lo que el ayuntamiento pedirá a Costas que las arregle con la mayor rapidez posible.