Desperfectos en el polígono de Montecristo. | Toni Escobar

Una trozo de valla de metal de unos cinco metros de largo caído sobre la acera y un paso de peatones o una farola partida por la base y que, en cualquier momento, una ráfaga de viento puede hacer caer sobre la vía. Son solo algunos de los nuevos desperfectos localizados en el polígono industrial de Montecristo una semana después de que empresarios de la zona alertasen de la situación de abandono que sufren las instalaciones.
«Esto sigue igual o peor. Por mucho que avises e insistas, aquí no viene nadie. No es que no retiren las chatarras y los vehículos abandonados de las calles es que no vienen ni a comprobarlo» apuntó al PERIODICO de IBIZA Y FORMENTERA Paco García, de Distribuciones Anga.

Los propietarios de empresas en este polígono lamentan la «desidia y falta de respuesta» por parte del ayuntamiento de Sant Antoni.

«Avisas y llamas a la policía pero nada, esto parece un vertedero», señaló Félix Montesinos, otro empresario instalado hace años en el polígono más grande de las Pitiüses y en el que los problemas crecen día a día.

«Hemos estado casi dos semanas largas con las luces de las farolas encendidas de noche y de día. Eso solo puede pasar por dejadez», argumentó Paco García, quien está instalado en el Polígono Montecristo Industrial desde su creación y ha visto día a día como han ido aflorando los problemas.

El asfalto de las calles está seriamente dañado por el paso diario de camiones de gran peso. Pero hay puntos en que no se trata de un asfalto descarnado por el rodamiento de vehículos, sino que el conductor tiene que esquivar socavones de hasta 30 centímetros de profundidad. «Si te descuidas y coges uno de estos agujeros puedes destrozar el vehículo o tener más de un accidente como ya ha pasado». indicó García.

Las zonas exteriores del polígono son los lugares que aprovecha mucha gente para deshacerse de los enseres que ya no quiere y hay parcelas que son auténticos vertederos ilegales.

Pero los problemas y coches abandonados también están presentes en las arterias principales del recinto.

Así, furgonetas y coches desguazados afloran en las aceras de la calle des Fusters y en la Avenida de Cas Corts.
Las señales de rotulación de las calles están borradas por los efectos del sol y el estado de algunas farolas son un auténtico peligro para los viandantes o conductores que pasan por la zona.

El día a día en el polígono se hace más complicado por los coches aparcados encima de las aceras y obstaculizando las salidas de empresas señalizadas. «Aquí la gente aparca donde les da la gana porque saben que no va a venir la policía», indicó uno de los afectados por esta situación.

El ayuntamiento de Sant Antoni advirtió que los trámites para la retirada de vehículos abandonados de la vía pública es un proceso que se puede alargar hasta dos meses ya que primero hay que localizar al propietario y notificarle la reclamación.
La concejala de Gobernación de Sant Antoni, Aída Alcaraz, indicó que «trabajan para dar soluciones a estos problemas».