El conseller de Cultura, Educación y Patrimonio David Ribas, acompañado de la concejala de Cultura del Ayuntamiento de Santa Eulalia, Anna Costa, el representante del obispado Francesc Xavier Torres Peters, y técnicos del Consell, realizó ayer por la mañana una visita de rigor a los trabajos de restauración del retablo de la iglesia de Jesús, coincidiendo con la llegada a Eivissa de técnicas de la Dirección General de Bellas Artes del Ministerio de Educación y Cultura.

En su encuentro Ribas se comprometió a dedicar un número monográfico del Quadern d’Arqueologia Ebusitana a este retablo que data de finales del siglo XV y cuya autoría se atribuye a Rodrigo de Osona. En este sentido, el conseller aseguró que «debido a que todavía se ignoran muchos aspectos sobre su autoría y creación» se está estudiando la posibilidad de escanear esta pieza artística para conocer los detalles de su proceso creativo y de sus restauraciones posteriores.

Proceso de restauración

Tal y como informó este periódico a principios de mes, los trabajos que se están llevando a cabo en el Centro Cultural de Jesús, encargados a la empresa Mitra Restaura SL, y que tienen un presupuesto de 157.000 euros a repartir entre el Consell d’Eivissa, el Obispado y el Ayuntamiento de Santa Eulària, está previsto que duren unos cinco meses.

Sin embargo la restauración de esta joya del patrimonio ibicenco y de gran riqueza cromática, magnificencia y monumentalidad, no es sencilla. El equipo de tres restauradoras encabezado por Ana Ordóñez primero ha tenido que realizar un examen organoléptico y un mapa de daños para comprobar pieza por pieza las diferentes alteraciones y tras dejar constancia documental y fotográfica, valorar los criterios a seguir.

Después, los trabajos propiamente dichos consistirán según confirmó Ordóñez en una limpieza superficial y un asentamiento del color para, igualar y equilibrar las zonas. Además, toda la película pictórica que haya perdido la adhesión, se fijará nuevamente con colas.

En este sentido, y con el fin de hacer una «restauración preventiva, en la que prima la conservación futura», Nieves Peinado, otra de las restauradoras, aseguró que «se utilizarán materiales con una eficacia probada en el tiempo como colas de proteínas animales como las que usaron los artistas que hicieron el retablo».

Igualmente, habrá que consolidar la madera «afectada por los xilófagos». No en vano, según el equipo de restauradoras uno de los mayores problemas del retablo se debe a la contaminación fúngica, «sobretodo en el guardapolvo, en las tablas laterales y, concretamente, en los planos inclinados que recibían la condensación». Por ello, estas tablas también se someterán a rayos X para poder ver el estado de los clavos y decidir si se dejan o se quitan dependiendo de lo que pueda alterar la obra. Una decisión que se tomará bajo el seguimiento del Instituto Español de Patrimonio.

Trabajo en la iglesia

Mientras todo esto sucede en el Centro Cultural de Jesús, también se está trabajando en la iglesia de la localidad para conseguir unas condiciones óptimas de conservación. Así, se hará un «drenaje por la parte exterior, en el interior se substituirá el revoco de cemento y la pintura plástica, por morteros de cal para que el edifico transpire y se insalará un sistema de aireación que permitirá un cambio en las condiciones de la iglesia para el buen mantenimiento de las tablas»