Los efectivos del equipo ROCA han empezado a realizar los contactos directos con las víctimas para tener un conocimiento más exhaustivo y poner las medidas más efectivas. | Toni Escobar

El equipo ROCA de la Guardia Civil está realizando un análisis exhaustivo de las denuncias presentadas las últimas semanas para determinar la franja horaria y las zonas «más calientes» en las que actúan los ladrones. Paralelamente, en los dos últimos días han mantenido diversas entrevistas personalizadas con víctimas de robos para analizar la casuística y tomar nota de las coordenadas donde se producen los asaltos.

«Confiamos en que el plan específico que estamos desplegando en la isla tenga resultados muy pronto», apuntó uno de los coordinadores del equipo ROCA en Eivissa que se reunió el jueves con cerca de medio centenar de vecinos de Sant Joan.

Geolocalización

Para maximizar la operatividad en la lucha contra los delincuentes la Guardia Civil está «mapeando» la isla ya que uno de los principales obstáculos, sino el mayor, es la gran diseminación de casas en las zonas rurales con accesos que, a menudo, juegan a favor de los ladrones.

El equipo ROCA consolidado en Eivissa está integrado por agentes con gran experiencia y conocimiento de la isla.
Tener localizadas en el mapa todas las viviendas es una experiencia que está presente en Formentera. Las viviendas de zonas rurales están numeradas y ello facilita y recorta los tiempos de reacción de los agentes en el supuesto de ser alertados por un robo.

Otro aspecto fundamental es el establecimiento de redes de contactos con vecinos. El teniente del equipo ROCA, José Artero, subrayó que el objetivo es ofrecer «cobertura integral y asesoramiento en materia de seguridad pasiva y activa».
Asimismo explicó que los robos en el campo son muy complejos ya que hay una casuística diferente según la zona. No es lo mismo la península que una isla y también hay diferencias entre Mallorca y Eivissa, y dentro de Eivissa, no es lo mismo Sant Josep que Sant Joan. «hay que hacer planteamientos específicos para puntos concretos», advirtió.

En este sentido, las entrevistas personalizadas con las víctimas de los robos sobre el terreno da un plus de información que puede ser fundamental para prevenir o, en el supuesto de un robo, facilitar la resolución y detención de los autores del asalto.

Los vecinos que han mantenido las primeras reuniones con los agentes destacaron la gran disponibilidad y se mostraron confiados en que el trabajo ponga coto a la acción de los delincuentes.

Denunciar siempre y alertar

Otro de los aspectos claves que destacan desde el equipo ROCA es denunciar siempre. «Hay que denunciar siempre por pequeño que sea el robo. Una denuncia no formulada es una posibilidad más para el delincuente», argumentó el alférez Sergio Bahamonde.

En las entrevistas con los vecinos también se insiste en que «alerten de cualquier cosa que no les cuadre. Si uno alerta de que lleva viendo 3 días un coche que no le suena en la zona, ahí puede empezar una investigación o abortar un robo», argumentó. De hecho, los dos primeros puntos del decálogo de actuación del equipo ROCA es el que hace referencia a la comunicación fluida y la colaboración entre Guardia Civil y vecinos, así como comunicar con el 062 si se detecta algún movimiento anormal que crea desasosiego al vecino de la zona rural.

Otro de los factores claves para la investigación de los robos es la trazabilidad de los objetos.

Para este cometido, desde la Guardia Civil piden a los vecinos que hagan un inventario de los objetos que tienen en casa con los números de serie en el material que lo tenga y si es posible aportar fotografías.

En caso de robo, este inventario facilita la recuperación de los objetos en el mercado negro, en chatarrerías o mercadillos. El equipo ROCA se mueve y desplaza a los puntos calientes y también trabaja en la recuperación de efectos persiguiendo a los receptadores.

«Esto es como un iceberg. Hay mucho más trabajo por debajo de lo que se ve», subrayó el teniente Artero. El equipo ROCA es la punta de lanza de todo un operativo específico para combatir la ola de robos que afecta desde verano a las zonas rurales de la isla y que deja más de un centenar de robos en puntos como Santa Gertrudis, Sant Joan, Sant Rafel, Sant Mateu, Sant Llorenç o Sant Josep.

LA NOTA

El complemento del Plan mayor de seguridad

Paralelamente al despliegue de un plan operativo ad hoc para combatir la ola de robos también está presente el denominado Plan Mayor Seguridad. Uno de los aspectos que incide el plan es en la prevención y medidas de seguridad que deben adoptar las personas mayores. Este segmento de la población son las víctimas de ladrones y, especialmente, de mu- chas estafas.

Entre los fraudes destaca las falsas revisiones de gas o electricidad. Los delincuentes acceden a los datos personales de las víctimas robando del buzón cartas con facturas de donde aparecen los datos del propietario.

Después se presentan con unas credenciales falsas aunque a veces incluyen hasta el sello de la empresa. Las fuerzas de seguridad recomiendan no abrir nunca a los desconocidos y preguntar a la compañía si realmente ha enviado a personal suyo para realizar alguna revisión.

En estos casos y como norma general, se recomienda comprobar siempre puertas y ventanas cuando abandonamos la casa.