Los hoteleros pitiusos han calificado la temporada turística 2015 como «agridulce» después de conseguir una ocupación entre los meses de mayo y octubre del 80,13% en la isla de Eivissa, lo que supone un aumento del 1,26% en relación a la temporada del pasado año, cuando la ocupación media fue del 79,14%.
En cuanto a Formentera, los hoteleros destacan que la ocupación hotelera durante los seis meses de temporada estival ha sido del 72,59%, cuando en 2014 fue del 72,8%. Un leve descenso que se explica por un mes de mayo muy flojo en la menor de las Pitiüses, que se ha visto compensado por los buenos meses de junio, julio y agosto, en los que ha habido más ocupación que el año pasado.

A pesar de las buenas cifrás y de un nivel de ingresos «positivo», el presidente de la Federación Hotelera de Eivissa y Formentera, Juanjo Riera, se muestra preocupado por «los problemas de las depuradoras de la isla, la rotura del emisario de Talamanca –con vertidos que han provocado el cierre de la playa en varias ocasiones– o los problemas de suministro de agua de pésima calidad en Sant Jordi y Platja d’en Bossa». Además, sostiene que el desdoblamiento de la carretera entre Vila y Santa Eulària «es urgente».
La zona turística que presenta unos mejores resultados en 2015 es la zona norte –que comprende los núcleos de Portinatx, Cala Sant Vicent y Port de Sant Miquel– donde la ocupación ha alcanzado el 82,53%, casi tres puntos porcentuales más que en 2014, cuando se llegó al 79,76%, lo que supone un incremento del 3,47%.

Desde la Federación Hotelera destacan que la tipología de turistas que se acomodan en establecimientos de Sant Joan «son parejas y, sobre todo, familias con oferta de todo incluido, que les permite saber de antemano el coste de sus vacaciones».
La única zona de la isla que ha tenido menor ocupación que en 2014 ha sido Santa Eulària, con un descenso del 0,2% en relación al 81,41% que alcanzó el pasado año. En el resto de zonas el incremento ha sido de aproximadamente el 1%.