La dirección general de Recursos Hídricos, dependiente de la conselleria de Medi Ambient, Agricultura i Pesca, ha recibido desde la isla de Eivissa más de 30 alegaciones al borrador del decreto de sequía que se prevé aprobar durante este mes.

Cinco documentos corresponden a ayuntamientos de la isla, uno ha salido del Consell Insular d’Eivissa y las otras 20 proceden de diferentes sectores implicados y de particulares. Asimismo, hay cinco escritos más del propio Govern, según la información a la que ha tenido acceso este periódico.

La mayoría de ellas hacían referencia a la posibilidad de declarar la emergencia de las obras que deben realizarse para poner en funcionamiento la desaladora de Santa Eulària y la red de distribución de las desaladoras de la isla, el denominado anillo de interconexión. Según indican fuentes oficiales de la conselleria balear, dicha alegación ha sido recogida en el nuevo borrador del decreto.

En otros escritos se solicitaba la adaptación de las instalaciones para la venta de agua desalada en camiones, en referencia al punto de carga de estos, petición que también ha sido incorporada al texto.

El departamento que dirige Vicenç Vidal ha tenido en cuenta aquellas alegaciones que hacían mención a la posibilidad de permitir nuevas perforaciones en aquellas masas de agua que se encuentran en mejor estado para la incorporación de jóvenes agricultores inscritos en el RGEA y para uso doméstico.

Según estas mismas fuentes, también se ha incorporado al decreto la publicación y frecuencia de la evolución de la sequía que se solicitaba en algunas alegaciones, que se realiza mensualmente y que se puede consultar en el Portal del Agua del Govern de las Illes Balears (http://dma.caib.es).

Por otra parte, la conselleria de Medi Ambient i Agricultura ha decidido reducir del 25% inicial al 20% el máximo de pérdidas posibles en las redes, obligando a los ayuntamientos a realizar determinadas actuaciones para evitar el porcentaje de pérdidas superiores.