La plataforma Ibiza, afectados por los alquileres asegura que la dificultad de acceso al alquiler se da incluso en invierno, donde se pueden encontrar pisos que salen al mercado hasta marzo o abril y se ofrecen, incluso, habitaciones en pisos o casas compartidas por 450 o 550 euros. Y eso que aún no ha llegado la temporada: «Como quien dice, ya casi está la temporada aquí y tendremos los mismos problemas que hace un año. La cosa está complicada; simplemente hay que echar un vistazo a la oferta que hay, que es carísima y escasa. Nos reuniremos a nivel interno para buscar soluciones e intentaremos de nuevo reunirnos con el Consell d’Eivissa», explicó Luis Gonzaga, uno de los portavoces de esta plataforma ciudadana que recibe «mensajes diarios sobre la poca oferta de pisos en alquiler anual que hay y los precios».

Abandono

De hecho, la dificultad para encontrar vivienda de alquiler anual está llevando a que incluso se vaya gente de la isla que llevaba años viviendo aquí. Esta dificultad se agrava aún más cuando se trata de familias con hijos y cuando la persona tiene mascotas. «Han pasado cuatro meses que busco algo decente para vivir y aún sigo buscando. Necesito casa de campo o piso con terraza no demasiado lejos para todo el año. Somos una pareja de residentes, jóvenes, solventes, tranquilos, trabajadores y con dos gatitos y un perrito. Llevamos cuatro años en la isla y tenemos referencias», es uno de los mensajes que se puede leer en grupos de Facebook como Alquiler /Rent Ibiza. El portavoz de Ibiza, afectados por los alquileres precisó que el número de personas que se van de Eivissa porque no pueden pagar el alquiler de una habitación, piso o casa va en aumento: «Se está yendo mucha gente incluso con trabajo porque no encuentran un lugar donde vivir», apuntó Gonzaga.

Una de las soluciones que están estudiando desde esta plataforma es la viabilidad legal de que bloques de pisos vacíos «salgan al mercado de alquiler anual». De hecho, tienen algunos ya localizados en zonas como ses Figueretes, la bahía de Sant Antoni, platja d’en Bossa y es Viver, lugares donde precisamente se vivió con más intensidad el boom inmobiliario previo a la crisis económica que estalló en 2008. «Se trataría de rehabilitar pisos que estén vacíos, bloques enteros que estén vacíos o bien que sean de protección oficial y que se les pueda dar un uso de alquiler. Queremos ver si se puede gestionar y hacer algo con ello porque estamos viendo que tendremos el mismo prlema que el año pasado». Para conseguir este fin, están estudiando con un abogado que colabora con ellos la viabilidad legal y cómo se podría hacer.