Sant Llorenç fue el lugar elegido por el Consell d’Eivissa para la segunda reunión informativa y votación vecinal sobre el proyecto de reforma de la carretera de Santa Eulària, un encuentro al que asistieron alrededor de 50 vecinos. Tal y como como recordó la consellera de Mobilitat, Pepa Marí, lleva ocho años en tramitación y fue un proyecto consensuado en la legislatura del socialista Xico Tarrés (2007-2010). Desde la máxima institución insular reiteraron que el objetivo de estas reuniones es informar a la ciudadanía de cómo ha quedado el proyecto, la tramitación seguida y recoger la valoración sobre el grado de aceptación del mismo. Mañana se presentará en Santa Eulària a partir de las 20,00 horas en el Palau de Congressos y el jueves a la misma hora en el centro cultural de Jesús.

Igual que ocurrió en la primera reunión que tuvo lugar el pasado jueves en la sede del Consell d’Eivissa, los vecinos de Sant Llorenç votaron ayer y depositaron en una urna su papeleta indicando una de las dos opciones: ‘Si, estoy de acuerdo con el proyecto’ o bien ‘No, no estoy de acuerdo con este proyecto’. Finalmente, del medio centenar de personas votaron un total de 20 de las que 16 dieron su voto afirmativo y únicamente cuatro se posicionaron en contra. En el turno de preguntas, algunos de los vecinos pedían agilidad al proyecto, mientras que otros manifestaron que el sondeo de opiniones debe ceñirse a las personas y localidades afectadas por el proyecto.

«Gran impacto»

«Es un proyecto con un gran impacto en el territorio y es importante que la ciudadanía lo conozca. Le faltan por lo menos tres o cuatro meses para acabar la tramitación y cuando esto ocurra debe empezar la licitación», explicó la vicepresidenta Viviana de Sans, quien apuntó que la decisión sobre si el proyecto se dejará tal cual o se modificará «corresponde al pleno del Consell d’Eivissa en el que hay representados tres partidos políticos».

Por su parte, la consellera Pepa Marí afirmó que «el proyecto está cerrado; ha pasado por un montón de fases; lo que ocurre es que si realmente viéramos que existe un amplio rechazo social habría que empezarlo de nuevo con el coste para la ciudadanía que esto implica», afirmó Marí.

Por su parte, el senador popular y también concejal en el Ayuntamiento de Sant Joan, Santi Marí, incidió en que el proyecto ya ha superado la fase de participación y que está consensuado. Además precisó que no se entiende que si el proyecto está cerrado y finalmente se hará, tal y como insisten desde el Consell d’Eivissa, se hagan las votaciones y encuestas.