Las fuertes rachas de viento, de hasta 70 km/h, y el temporal marítimo, con olas de hasta 3 metros, provocaron ayer diversas incidencias en las Pitiüses. Una de las más importantes fue el apagón que sufrieron desde mediodía 809 clientes de la compañía Endesa en las parroquias de Santa Gertrudis, Santa Agnès y Sant Mateu debido a un fallo en la línea aérea de media tensión a causa del viento. A media tarde seguían sin luz unas 80 viviendas.

Además, el temporal obligó a suspender la rua de Carnaval de Sant Antoni, aplazada al próximo martes. Y al menos un servicio marítimo entre Eivissa y Formentera tuvo que ser suspendido.

Otra de las consecuencias es que la Conselleria balear de Medi Ambient ha suspendido las autorizaciones para realizar fuegos controlados en Eivissa y Formentera por la alerta amarilla decretada. Para hoy la previsión es idéntica a la de ayer, y las rachas de viento comenzarán a remitir a partir de mañana.

Por último, una dotación de bomberos tuvo que retirar una chapa de grandes dimensiones de un solar que el viento había lanzado a la avenida Sant Josep de Vila.