El conseller de Territori, Energia i Mobilitat, Joan Bonet, se desplazó ayer por la tarde a Formentera donde mantuvo un encuentro de cerca de una hora con las conselleras de Territori y de Medi Ambient del Consell Insular de Formentera, Alejandra Ferrer y Daisee Aguilera, respecticamente, así como con miembros de la Asociación de Vecinos de es Ca Marí. El tema a tratar, como no podía ser de otra manera, fue el de encontrar una solución definitiva a los ruidos, humos, contaminación y la falta de seguridad en la Central Eléctrica de Endesa que padecen los vecinos de dicho enclave durante todo el año.
Según explicó el conseller Bonet, «las medidas que pretendemos abordar en un término previsto entre dos y tres meses consisten, fundamentalmente, en solventar estas deficiencias, a través de un cambio de los grupos electrógenos por otros más eficientes y en un número inferior a 11 que son los que existen actualmente y en crear un sistema de absorción desde dentro del recinto».
Asimismo el conseller comentó que las chimeneas de salida de humos se elevarán entre 8 y 10 metros más de altura. «Esta es una alternativa hasta que se pueda cumplir con la necesidad del servicio eléctrico eficiente que necesita la isla durante todo el año», apuntó Bonet.
Con respecto a los cortes de luz producidos el pasado fin de semana y que afectó a 266 usuarios de Porto Saler, Cala Saona, ses Bardetes y es Cap, Joan Bonet compartió la indignación de los vecinos «ya la climatología adversa, en este caso fuertes vientos, tienen que estar previstos dentro de los protocolos de actuación de la compañía eléctrica y ya hemos pedido explicaciones».
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