La planta temporal de cemento y asfalto se ha situado junto al Pas d’en Mateu, en Sant Llorenç. | Arguiñe Escandón

Presumiblemente, la planta temporal de cemento y de asfalto que se ha instalado en es Pas d’en Mateu se quedará donde está, a pesar de las quejas de los vecinos de la zona. La consellera de Mobilitat, Pepa Marí, aseguró ayer que reubicar la instalación implicaría «un retraso importante en la obra».

Además, según los servicios jurídicos del Consell d’Eivissa, la empresa adjudicataria de las obras de remodelación y mejora de la carretera de Sant Joan, la UTE formada por Copcisa y Construcciones Olives, «tienen razón» para ubicarla en su lugar actual a pesar de que en el proyecto aprobado figuraba en otra localización, en unos terrenos del Ayuntamiento de Sant Joan.

La consellera Marí aseguró que ayer hablaron con la empresa y que ésta, a falta de que entregue la documentación requerida, cuenta con el permiso medioambiental necesario (otorgado por el Govern en pasada legislatura, según la consellera) para instalarla la planta en es Pas d’en Mateu. «Se ve que en [el Ayuntamiento de] Sant Joan no estaban de acuerdo en que se instalara en terrenos municipales y no les concedieron una autorización», señaló la consellera Marí, quien apuntó a una posible «connivencia» entre administraciones durante la pasada legislatura.

Los terrenos propiedad del Ayuntamiento de Sant Joan se encuentran en una parcela conocida como sa Plana de na Marca, detrás del restaurante Can Coroner.

Un grupo de 77 vecinos de la zona de sa Plana d’en Mateu y de la vénda de Safragell, en Sant Llorenç, presentó a principios de un escrito dirigido al Consell d’Eivissa y al Ayuntamiento de Sant Joan en el que solicita el cambio de ubicación de la planta de cemento y asfalto. «Este inesperado cambio de ubicación supondría la conculación de nuestros derechos, ya que si en su día no presentamos alegación alguna fue porque considerábamos que la ubicación era la más idónea, pero la ubicación que al parecer se propone lesiona gravemente no solo nuestros intereses sino nuestra salud y nuestro entorno», se asegura en el escrito.

«A mí nadie me ha llamado ni me han contestado. No entendemos qué es lo que estamos pasando», señaló a la Televisió d’Eivissa i Formentera Juan Munar, uno de los vecinos afectados.