Imagen de archivo de la EDAR de Santa Eulària, que el año pasado desprendía un fuerte hedor hasta el punto de que los vecinos vomitaban. | ARCHIVO

El Ayuntamiento de Santa Eulària exige de nuevo la puesta en marcha de un plan de mantenimiento «urgente» para la depuradora del municipio, que ya el verano pasado ocasionó numerosas molestias a los vecinos por el fuerte olor que desprendían los lodos que no habían sido retirados. En este sentido, el equipo de gobierno de la Villa del Río llevará al próximo pleno una nueva propuesta de acuerdo para reclamar la puesta en marcha de este plan de mantenimiento con el que se evitarían «los problemas de emisiones y olores que se vivieron el año pasado a causa de la falta de una gestión correcta y continuada de la instalación por parte de Abaqua», explicaron desde el Consistorio, desde donde apuntaron que han dirigido «reiterados escritos a la conselleria de Medi Ambient del Govern para el inicio de las actuaciones necesarias que garanticen el correcto funcionamiento de la depuradora; hasta el momento no se ha informado de que se haya tomado ninguna medida al respecto pese a los anuncios hechos por parte de las autoridades competentes».
La respuesta
Además de llevarlo a pleno, el Ayuntamiento de Santa Eulària ha pedido la inclusión de este punto en el orden del día del próximo Consell d’Alcaldes que se celebrará la semana que viene «ya que se trata de un tema muy grave que afecta de manera muy importante a los vecinos y visitantes de Santa Eulària».
Por su parte, desde Medi Ambient del Govern recordaron ayer que, según se establece en el plan director de residuos de Eivissa, «la conselleria no es gestora de residuos» y que los lodos que emanan de las depuradoras «deben ir a parar a una planta de compostaje o bien a terrenos agrícolas como abono». En este sentido recordaron que el problema de emisiones que vivió la depuradora el año pasado se debe a que «no se extrajeron los lodos ni se gestionaron, lo que provocó el problema de olores en verano». A esto hay que sumar, según destacaron, que hubo «vertidos de productos químicos a la red de alcantarillado local, que depende del Ayuntamiento, lo que provocó una alteración en el proceso biológico de la depuradora y afectó a los lodos», destacaron desde Medi Ambient.
Desde el Ejecutivo balear afirmaron ser conscientes de la problemática que genera esta depuradora a vecinos y turistas y, por ello, trabajan «conjuntamente con el Consell d’Eivissa para determinar las mejores prácticas en lo que respecta a la gestión de los lodos». Entre las propuestas destacaron la «preparación de terrenos para la aplicación de los lodos y su mezcla inmediata con la tierra, de forma que se minimicen las molestias a los vecinos. Para facilitar esta labor, la conselleria ha solicitado a Santa Eulària «un listado de fincas agrícolas donde se puedan aplicar estos lodos con el mínimo de perjucio posible».