El previsible aumento del número de turistas que vendrá a la isla esta temporada turística por la delicada coyuntura internacional en Oriente Medio agravará los ya importantes problemas de abastecimiento de agua que se registraron en años anteriores.

El alcalde de Eivissa, Rafa Ruiz, lo reconocía ayer durante la visita que hizo a la desaladora del municipio con motivo del Día Mundial del Agua. Aún así, aseguró que Vila se volverá a solidarizar con Sant Josep como hizo el año pasado cuando se suministró al municipio vecino un total de 700 metros cúbicos al día durante el verano. Ruiz, que reconoció el trabajo realizado por su homólogo, el alcalde de Sant Josep, Josep Marí Ribas Agustinet, por «intentar paliar la desgracia que tienen», remarcó no obstante que «no se puede vestir un santo para desvestir otro».

Más control

«Vila es el municipio que mayor control tiene sobre el agua. Sabemos dónde va a parar el 85 por ciento de nuestra agua. Otros no pueden decir lo mismo y eso se tiene que tener en cuenta a la hora de repartirla», argumentó. Ruiz añadió también que «aunque el agua se debe compartir, se tiene que valorar también si otros no han hecho las inversiones necesarias».

En este sentido, pidió un aumento en el control de las fugas de agua y recordó que el Ayuntamiento de Eivissa va a construir un tanque de tormentas en Can Misses con capacidad para recoger 3.000 metros cúbicos de agua de lluvia. «Con la falta de agua que tenemos, parece mentira que no tengamos 4 o 5 en cada municipio», insistió.

El alcalde de Eivissa también centró sus críticas en que, por una parte, las inversiones autonómicas y estatales «no han sido las que debían en los últimos años» y, por otra, el elevado número de turistas que recibe la isla.

Según dijo, las infraestructuras son «deficientes» pero la solución no consiste en «crear más desaladoras porque tienen un coste muy importante, de construcción y también de mantenimiento».

Ruiz calificó de «incomprensible» que no funcione la interconexión de la depuradora de Santa Eulària y recordó que la construcción de la nueva depuradora de Vila será «compleja y larga».

LA NOTA

¿Sois conscientes de lo que cuesta que salga el agua cuando abrís un grifo?

El principal objetivo de las visitas de los colegios a la depuradora de Eivissa es concienciar a los ciudadanos desde que son niños para hacer un uso responsable del agua es el principal objetivo.

Con motivo del Día Mundial del Agua, el encargado ayer de explicar a los alumnos de cuarto de primaria del CEIP Sa Bodega fue el alcalde de la ciudad, Rafa Ruiz, quien hizo gala de sus años dedicados a la docencia. Durante su explicación, insistió en «lo fácil que es gastar el agua» y la dificultad, en cambio, de generarla. «Toda el agua que sale del grifo de vuestras casas se obtiene de aquí», destacó Ruiz.

Los niños prestaron atención a las explicaciones del alcalde y, al final de la exposición, llegó el turno de preguntas que pusieron en más de un aprieto a Ruiz. «¿Por qué no funciona la desaladora de Santa Eulària?», preguntó un alumno de Sa Bodega, a lo que el alcalde resumió en que «está acabada pero todavía no puede funcionar».

Cuestiones hídricas aparte, los alumnos parecieron estar más interesados en otros asuntos como en la instalación de más pistas para jugar al fútbol en el Parc de la Paz. «Lo consultaré con el concejal de Deportes», respondió Ruiz.