Ni el autismo es una enfermedad contagiosa ni los niños con este trastorno son unos malcriados a quienes no han sabido educar. Los padres de niños autistas tienen que luchar casi a diario contra estos estereotipos que nada tienen que ver con la realidad.

Mirela Maximet es la madre de Carlos, un niño de 4 años y medio que fue diagnosticado en la guardería. «Él tuvo suerte y recibió terapia desde los dos años pero hay muchos padres que no se lo pueden permitir», cuenta.

En Eivissa hay en la actualidad al menos una veintena de niños con autismo que están pensando en constituirse como asociación. Ayer hicieron una marcha desde el Consell hasta Vara de Rey con motivo del Día Mundial del Autismo, vestidos con camisetas azules, con el lema «Diferentes, no menos» y globos del mismo color con el objetivo de visibilizar el trastorno (que no enfermedad como recalcan) y reivindicar ayudas públicas que costeen las terapias que estos niños necesitan para mejorar su conducta.

Tamara Knecht es madre de Kristel, una niña autista de once años y que no acudió a la marcha porque no puede estar en el exterior. Es uno de los casos más graves de autismo en Eivissa y necesita una persona constantemente a su lado para evitar que se autolesione. Tamara, divorciada y madre de otros dos niños, asegura que los servicios sociales solo le ofrecen como alternativa internarla en un centro de Palma y cuenta con resignación cómo es su día a día: «La manera que tiene de llamar la atención es pegándose en la cabeza. Cuando le da la rabieta tienes que retirar todo lo que hay alrededor. Ahora no es capaz de comunicarse pero en todos estos años hemos padecido horas y horas de chillidos antes de dormirse».

En la marcha estuvo presente también Lydia Jurado, consellera de Benestar Social, quien recordó la necesidad de disponer de más medios en la unidad de Psiquiatría del centro de salud de Vila, donde en estos momentos solo trabajan un psiquiatra a tiempo completo y otro a tiempo parcial para atender a todos los pacientes de Eivissa y Formentera.

Jurado también propuso la creación de una unidad itinerante compuesta por un médico y un enfermero que debería realizar labores de prevención en los colegios con niños con trastornos de conducta.

LAS CIFRAS

290 casos. En el último año se han registrado 290 casos de niños en Eivissa que necesitan tratamiento psiquiátrico específico.

20 terapia. El número de horas de terapia que se recomiendan es de 20 a la semana aunque muchos padres no tienen recursos para pagarlas.