El Consell d’Eivissa y la empresa responsable de las obras de la carretera de Sant Joan cortaron ayer completamente un tramo de dos kilómetros para retirar una línea eléctrica y finalizar los trabajos en un terraplén que eleva de forma considerable la rasante actual de la carretera.

El tramo está comprendido entre el Trull d’en Vic (PK 10 + 600) y es Pas d’en Mateu (PK 12 + 412), donde está prevista la construcción de una rotonda que enlace con la vénda de Safragell y en la actualidad se ha instalado la planta que debe disponer de todo el material para asfaltar el nuevo trazado.

Durante el tiempo que este tramo esté cerrado completamente al tráfico, se ha habilitado una ruta alternativa que únicamente afectará a vecinos, vehículos de servicio, usuarios de comercios y transporte escolar, ya que esta vía ya estaba restringida al tráfico con anterioridad.

Los trabajos de ampliación y reforma de esta vía encaran la recta final. Según las previsiones del Consell d’Eivissa, las obras deben finalizar a finales del mes de junio. En pocos días debería empezar el asfaltado de la carretera.