El lote de Cala Saona incluye dos estanterías, diez paddle surf y otros tantos kayacs con un canon de partida de 3.000 euros.

La subasta de lotes de playa de Sant Josep fue la puerta de entrada del empresario canario Mahy Marrero para acceder «al suculento mercado» de Eivissa, pero en su horizonte también se halla la exclusiva Formentera, concretamente dos lotes en las zonas de Cala Saona y s‘Estany des Peix, que están pendientes de adjudicación.

«Aquí se gana más en unos pocos meses que en todo el año en las Canarias», señaló Marrero durante un receso de la subasta celebrada en Sant Josep. Pero el empresario canario procesado por tráfico de drogas no se conformaría con los once lotes obtenidos provisionalmente en Sant Josep y podría desembarcar también en Formentera. La oportunidad le vendría del concurso de dos lotes pendientes de adjudicación para el periodo 2016-2020.

Empresarios consultados por el PERIÓDICO de IBIZA Y FORMENTERA no descartan que alguna empresa de Marrero figure entre las inscritas para pugnar por los lotes. El proceso para la adjudicación del contrato de explotación se publicó en el BOIB el 24 de marzo. Tres semanas antes, el 3 de marzo, Mahy Marrero registró hasta siete empresas, cuyo objeto social era el alquiler de artículos de ocio y deportivos; turismo, hostelería y restauración. Siete empresas con las que reventó los precios durante la subasta de lotes de Sant Josep.

Hoy está previsto que el Consell Insular de Formentera haga públicas las empresas que aspirarán a los lotes correspondientes a Cala Saona y s’Estany des Peix para el periodo 2016-2020.

Lotes a concurso

El lote de Cala Saona está compuesto por dos estanterías, diez tablas de paddle surf y otros tantos kayacs. El canon de salida estipulado en el pliego de condiciones es de 3.000 euros.

Por su parte, en lote en la zona de s’Estany des Peix parte con un canon estipulado de 2.500 euros para una concesión de 20 hamacas y 10 sombrillas.

El concurso planteado por el Consell Insular de Formentera se lleva a cabo a través de sobre cerrado y tiene una serie de restricciones para evitar situaciones como la que se ha planteado tras la subasta a mano alzada celebrada en Sant Josep. Así, la oferta máxima no puede ir más allá del 50 por ciento del canon inicial marcado. En el caso de Cala Saona, donde se parte de un canon de salida de 3.000 euros, lo máximo que se puede ofrecer son 4.500 euros.

Criterios

Los criterios planteados recogidos en las bases reflejan una puntuación máxima de 60 puntos para cada uno de los lotes. La oferta económica otorga un total de 35 puntos, mientras que las empresas que aspiren a los lotes podrán obtener otros 25 puntos mediante una baremación de méritos.

El pliego de condiciones recoge la suma de tres puntos para el empresario que aporte un título de socorrista, un plus que asciende hasta los cinco puntos si se tiene la titulación para actuar en espacios naturales.

Los aspirantes también pueden sumar un punto por cada 300 euros que la oferta destine a la conservación de la playa.

El próximo lunes, una mesa técnica abrirá los sobres que incluyen las ofertas que se hayan presentado ante el Consell Insular de Formentera. Cuando se hagan públicos, se conocerá si entre los aspirantes figura Explotaciones Pitiusas de Servicios o alguna de las otras seis marcas registradas por Marrero Sosa.