Casanova aparece junto a una mujer durante el mitin de Sánchez el pasado sábado en Vila. | Toni Escobar

El PSIB explicó ayer que fue su diputado Enric Casanova el que «se sintió agredido» en un establecimiento y, por ello, fue él el que llamó a la Policía Local.
Así lo manifestó la diputada del PSIB, Bel Oliver, después de que este medio, entre otros, publicase el sábado que el socialista había tenido una discusión con una camarera de origen rumano. Según la denuncia presentada por la camarera, Casanova la envió a su «puto país» por no entender que había solicitado un té con limón. Dicho bar se encuentra enfrente de la sede del Consell d’Eivissa.
«Entiendo que fue un suceso lamentable», dijo Oliver, quien añadió que fue el parlamentario el que fue «objeto de agresión», aunque él «no agredió verbalmente, ni de otro tipo a esta persona». El PSOE solo da por buena la versión del diputado Casanova, igual que IB3, que ayer ofreció la noticia (tres días después de haberse cometido el incidente) y no incluyó ningún testimonio de la camarera que denunció lo ocurrido en el bar de la Avenida España. Casanova presentó una reclamación en Consumo ofreciendo su versión sobre los hechos.
«Fue él el que llamó a la Policía porque se sintió agredido y se acabó formalizando una denuncia a Consumo» por este hecho, al ser un tema de atención al público, reiteró Oliver.
El sábado algunos dirigentes socialistas también respaldaron a Casanova a preguntas de este medio, pero curiosamente el diputado quedó en un segundo plano durante el mitin de Pedro Sánchez celebrado en Vila. Pese a que el candidato socialista se hizo una fotografía con todos los altos cargos del PSOE ibicencos, en la imagen no aparecía por ningún lado Casanova. Los principales dirigentes socialistas ibicencos no se han posicionado a favor de Casanova en las redes sociales, que ha recibido muchas críticas y algún apoyo por defender el uso de la lengua catalán en un bar.
Sobre este asunto, la portavoz del grupo popular en el Parlament, Marga Prohens, calificó lo ocurrido como «un episodio xenófobo». «Es muy grave que un diputado de esta Cámara diga lo que dijo en contra de una camarera por no entender el catalán. Hacemos discursos de acogida a refugiados, de acogida de emigrantes, temas que la izquierda siempre vende muy bien, pero después tenemos un diputado socialista que protagoniza un episodio tan lamentable como este», dijo Prohens en la habitual rueda de prensa de los lunes.
«A día de hoy nuestra televisión pública no ha dado nada sobre esta noticia, un asunto que ha tenido repercusión nacional. Aquí parece que no ha pasado nada. Me gustaría saber qué tratamiento hubiese tenido en caso de ser un diputado del grupo popular. Yo, desde luego, hubiese criticado a un diputado del PP si llega a protagonizar un hecho similar», comentó la portavoz popular.
«Sánchez no ha dicho ni mu, ni Armengol, pero supongo que dirán algo», lamentó Marga Prohens, quien pidió que la Cámara apruebe una declaración institucional en contra del racismo y la xenofobia.