A la derecha, prototipo de trampa que ha conseguido atrapar más ejemplares gracias al rediseño, que ahora cuenta con dos compartimentos separados para el reptil y el ratón, que se utiliza como cebo.

El Govern balear y el Consell d’Eivissa repartirán 350 trampas para combatir la plaga de serpientes que sufre la isla. Esta es la principal medida del programa de control de serpientes impulsado por la Conselleria de Medi Ambient que ayer los consellers Vicenç Vidal y Miquel Vericad presentaron en sa Coma con el objetivo de controlar la población de ofidios, ya que su erradicación es prácticamente imposible.

Esta es la primera vez que el Govern se implica en la lucha contra los ofidios después de que en 2014 y 2015 el Consell pusiera en práctica un plan piloto de control de estos reptiles. El año pasado, por ejemplo, se capturaron 121 serpientes con un promedio de 0,6 capturas diarias por cada 100 trampas. Un promedio que este año se ha disparado gracias a los nuevos diseños de las trampas, que impiden a las serpientes salir del habitáculo donde quedan atrapadas. Desde el 28 de mayo ya se han instalado 40 trampas en la isla con el resultado de 45 serpientes atrapadas, lo que supone una media de casi 12 capturas diarias por cada 100 trampas, 20 veces más que con los primeros modelos instalados. En Formentera, donde llevan instalando trampas un mes más, ya han capturado 191 ejemplares en las 69 cajas, lo que supone una media de 11 capturas diarias por cada 100 trampas.

Las trampas, elaboradas por los alumnos de la Escola d’Arts i Oficis d’Eivissa, se distribuirán a particulares interesados, viveros y jardines con olivos u otros grandes árboles ornamentales importados y colaboradores institucionales. Los colaboradores tienen que asumir la supervisión de la trampa reponiendo el alimento y el agua al ratón que se usa como cebo (la Cooperativa de Santa Eulària los vende), pero sin necesidad de manipular las jaulas ni los reptiles. Su contribución se limita a avisar por teléfono de la captura de una serpiente, o de cualquier otra incidencia, al teléfono de 24 horas del Consorcio para la Recuperación de la Fauna de las Islas Baleares (Cofib).

Además, el Consell d’Eivissa colgará en su web los planos para que aquellos que quieran construir su propia trampa sepan cómo hacerlo.

Desde el pasado lunes este programa cuenta con una veterinaria del Cofib destinada sólo a este proyecto, que dispondrá de un vehículo y un espacio de trabajo en las instalaciones del Instituto Balear de la Naturaleza (Ibanat) en sa Coma.

Al término de la presentación del programa de control de las serpientes, los técnicos del Consell d’Eivissa comentaron que el 57% de la dieta de estos reptiles lo forman las lagartijas, toda una amenaza para este animal endémico de nuestras islas. Además, tanto Jaume Estarellas como Elba Montes señalaron que las culebras que habitan las Pitiüses son de mayor tamaño que las de la Península «porque aquí encuentran más alimento y no tienen depredadores» como el águila culebrera, el meloncillo o la garduña.

Serpientes nadadoras

Los técnicos también señalaron que se han detectado seis ejemplares de serpientes nadando en nuestras aguas y que años atrás se encontró una muda de ofidio en el islote de s’Espartar.

El inicio de la plaga de serpientes (la primera se detectó en 2003) se ha vinculado a la introducción de olivos ornamentales desde la Península como elemento de jardinería ornamental. El conseller Vidal señaló que el Govern no tiene competencias para controlar la llegada de estos árboles por motivos de bioseguridad, pero que ya han hecho llegar esta petición al Gobierno estatal para que implante medidas al respecto.

Los ejemplares encontrados en Eivissa y Formentera son la culebra de herradura (Hemorrhois hippocrepis) y la serpiente blanca o de escalera (Rhinechis scalaris). Las zonas donde mayor densidad de serpientes halladas son Sant Llorenç, Sant Rafel, Santa Eulària, Sant Carles y Sant Vicent.

La picadura de este reptil no es venenosa, aunque se recomienda curarla con desinfectante.