La Asociación Deportiva de Discapacitados de Ibiza y Formentera (ADDIF) ha pedido al Ayuntamiento de Eivissa ayuda para resolver la «crítica» situación económica en la que se encuentra dicha entidad.

La presidenta de ADDIF, Myriam Martín, se reunió esta semana con el alcalde de Eivissa, Rafa Ruiz, y los responsables del Patronato de Deportes para «reconducir el conflicto» surgido por la explotación del bar por parte de la asociación en el campo de fútbol de Can Cantó.

Martín lamentó que no se vaya a disputar la Liga de verano que se lleva a cabo durante estos meses en las instalaciones deportivas por el perjuicio económico que supone para ellos, ya que las ganancias procedentes del bar suponen su principal fuente de ingresos.

Según señaló, los responsables de ADDIF han entregado las cuentas a los responsables municipales, quienes se han comprometido a estudiar la situación y compensar las pérdidas que ocasiona que el bar no tenga actividad durante tres meses al año.

La semana pasada, ADDIF acusó al concejal de Deportes, Agustín Perea, de «primar sus intereses familiares» tras conocer que el equipo de fútbol Insular, a cuya junta directiva pertenece la familia de Perea, había expresado su interés por adquirir los derechos de explotación de este bar.