‘Pane e Alio’ abrió hace una semana en el Mercat Nou de Vila. Foto: D. MANAU

En el preciso momento en que la temporada turística vira hacia su punto más álgido, el Mercat Nou vive la incorporación de una seductora novedad. No se trata de una nueva frutería, ni de un puesto de pescado o carne. Lo anunciamos semanas atrás cuando repasamos los últimos negocios que se han añadido a la oferta de esta plaza. Se trata de ‘Pane e Olio’, un espacio donde se reúnen los sabores más exquisitos de Italia.

Hoy hace una semana que abrió sus puertas este puesto que regenta Salvatore Teoedoro, un chef y empresario conocido en Eivissa por gestionar un negocio de catering dirigido a villas y yates que ahora ha decidido complementar con este humilde y a la vez elegante puente que nos lleva a la más genuina gastronomía transalpina.

«Nuestra intención es la de llegar al público ibicenco, a la vez, a un buen número de turistas que acuden al mercado», explica Teodoro.

Él mismo eligió el pan y el aceite para dar nombre a su nueva aventura por ser «dos ingredientes esenciales que se encuentran en casi todos los platos de la cocina italiana». Pero en un simple vistazo podemos comprobar que ‘Pane e Olio’ guarda un sinfín de sorpresas. Y es que en este espacio se puede adquirir una amplia gama de exclusivos productos. «Sólo queremos tener lo mejor, para la gente que conoce la diferencia de los ingredientes de primerísima calidad y que le gusta cocinar en casa pero con los mejores ingredientes, un perfil que cada vez se da más», señala.

De entre su oferta, el comerciante destaca un par de referencias. «Tenemos aceite de oliva de la Saetta [58 euros por cada lata de cinco litros]. Está hecho de aceitunas de Sicília, que son muy sabrosas y permiten hacer un aceite muy particular, muy fuerte y que queda muy bien en ensaladas», detalla.

También presenta la colección de salsas Salemipina. «Son ecológicas y de productos genuinos, nada que ver con lo que se puede encontrar en un supermercado», afirma. Así, apunta el delicioso resultado de esta firma con la crema de peperonni dulce, el pesto all trapanese o la salsa de tomate cherry de la ciudad siciliana de Pachino, «algo único que hay que probar», según dice.

Asimismo, defiende además la exquisitez del prosecco de Rivalaselle, un vino espumoso similar al champán producido en el norte de Italia que cuesta 12 euros la botella y que sorprende por su afrutado sabor. Es precisamente el que sirven estos días dos simpáticas chicas a lo largo y ancho de los pasillos del Mercat Nou, junto con algún pequeño aperitivo a modo de degustación.

Más allá de la venta de productos, ‘Pane e Olio’ dedica la mayor parte de su espacio disponible a la comida preparada. Así, encontramos raciones de lasaña –elaborada con masa propia, a 5,50 euros– o parmigiana, una tarta de berenjena con salsa de tomate y el famoso queso parmesano, que cuesta 4,50 euros. También nos sorprende con un cous-cous de pescado, que «en esta ocasión, es de pez espada, emperador», comenta. Tampoco podían faltar las pizzas, de pequeño formato pero de aspecto impresionante. Desde la clásica margarita (5’00 euros), hasta las más sofisticadas con gorgonzola y tomate (5’50 euros) o mezclum de ricotta y salsa de atún (5,50 euros), una manera exquisita de calmar el hambre.

Para los más golosos, en el escaparate, este chef siciliano también nos seduce con sus postres dulces, como las tartas de frutas o de nutella, todas ellas a 3,00 euros/unidad), o unas delicadas cookies con forma de corazón.