Los restos fecales atravesaron toda la parte de la arena y llegaron hasta el mar.

El Ayuntamiento de Sant Josep cerró ayer por la mañana el Caló d’en Serral, en la zona de Cala de Bou, después de que un vertido de aguas fecales llegara hasta esta playa de la bahía de Portmany. Según el Consistorio josepí, este vertido se produjo después de una avería eléctrica que provocó que las bombas que impulsan las aguas fecales hasta la depuradora de Sant Antoni dejaran de funcionar.

Poco después del mediodía se desplazaron hasta la zona una brigada del Ayuntamiento para limpiar la playa de los restos fecales, mientras que la Policía Local ya había cerrado la playa al baño.

Mínimo 24 horas

El Caló d’en Serral estará cerrado al baño durante al menos 24 horas, a la espera de los resultados de los análisis practicados. Si éstos no son aptos la playa continuará cerrada.

Empresarios de la zona fueron los encargados de avisar ayer al servicio de emergencias 112 ya que los vertidos causaron un hedor «insoportable». Cabe destacar que en esta playa hay varios establecimientos de alojamiento turístico, entre ellos, un hotel de cuatro estrellas, por lo que vecinos y empresarios lamentaron la mala imagen para la zona.

Este verano ya hubo que lamentar otro vertido de aguas fecales en Cala de Bou, concretamente en la playa de s’Estanyol, por culpa de la rotura del colector de la depuradora de Sant Antoni. En este caso, que se produjo en el mes de junio, las aguas fecales llegaron a la playa procedentes de la avenida de Sant Agustí.