Una fotografía de la obra del pintor ibicenco Rom Ero titulada ‘Tábula Rasa’, ganadora del certamen. | Victor Moreno "Vitorino"

Tábula Rasa es el título de la colorida obra del artista ibicenco Luis Miguel Romero Jiménez, más conocido como Rom Ero, que le ha valido el primer premio a las Artes Visuales Lio Malca. «Es una obra que a mí me gusta, la veo bastante impactante y, hombre, no la podría tener cualquiera en el salón de su casa porque son colores muy fuertes y es una cosa muy subida, pero a mí me gusta. Son colores encendidos y hay gente que quiere colores apagados y neutros que no le molesten, pero yo ahora mismo estoy por el colorazo», sentenció rotundo el pintor.

El tema planteado para el concurso respondía al título Borrón y cuenta nueva «y al principio me pareció difícil, pero luego me acordé de que tenía unos cartones de tabaco antiguos, abiertos, con unas cuentas de un bar que había debajo de mi estudio de Barcelona, de los años 90». Estaban llenos de borrones y cuentas nuevas «porque antiguamente las cuentas se hacían sobre papel y de cabeza», recuerda el artista con cierta nostalgia a la vez que analiza que, «lo de los cartones de tabaco para hacer cuentas no deja de ser una curiosidad del pasado y un reciclaje, quizás era porque al ser de cartón más duro que el papel costaba más perderlos».

Un mes tardó Rom Ero en realizar un cuadro para el que utilizó su elaborada técnica mediante la que mezcla masillas con colores, pigmentos y resinas. «Lo hago como si estuviera empastando una pared, no es pintura que aplique con brocha, sino que la aplico con espátula o con diferentes esponjas».

Este autor que nunca se había presentado a ningún concurso porque nunca le habían interesado, desde el inicio de esta convocatoria consideró que se trataba de una iniciativa «muy positiva con una gran carga energética para la isla». Para Rom Ero, esta ha sido una propuesta de alguien que tiene la experiencia y una colección importante y que se ha preocupado por los artistas de la isla. Y precisamente por este motivo al ganador del certamen le sorprendió que nada más se presentaran 11 autores al concurso, «han sido muy pocos».

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Volviendo a la obra ganadora, su autor recuerda que estaba trabajando en un encargo que le hicieron y por ese motivo tenía una tela de grandes dimensiones (2,5 metros) que le vino muy bien para el inicio esta creación. «Por cierto que creo que soy de los pocos que han elaborado una obra especial para esta convocatoria», comentó.

Y comenzó a utilizar los colores. «Ya el año pasado en Sa Nostra hice una exposición y ya tenía colores subidos. Incluso alguien me comentó que parecía que lo había hecho una mujer por tener colores tan vivos. Aquel comentario me pareció una tontería. He tenido diferentes fases: he pintado en blanco y negro, monocromos y ahora estoy en este momento».

Este artista supone que «el subconsciente siempre está trabajando o será que yo necesito eso colores porque me salen de dentro, desde luego». Cree bastante en la cromaterapia y en que «un color u otro te maneja en una dirección u otra. Los colores son muy importantes», consideró.

En este último año Rom Ero ha realizado muchos mosaicos «porque también tengo una rama de paciencia muy importante, y en eso estoy», bromeó. Acaba de finalizar un mosaico que es un retrato del conocido Ricardo Urgell, «que ni él sabe todavía» y trabaja en una próxima exposición en la que «algún mosaico expondré», supuso.