Una imagen de las obras en la calle y la plaza de Isidor Macabich en Santa Eulària.

Las obras de peatonalización de la calle y la plaza de Isidor Macabich en Santa Eulària, conocida popularmente como la plaza del Cañón y que empezaron el pasado mes de octubre, incluirán la instalación de las canalizaciones necesarias para dar suministro de gas natural en las viviendas próximas.

Así lo han acordado el Ayuntamiento de Santa Eulària y la empresa suministradora Redexis, según señaló el Consistorio a través de un comunicado, «para evitar las molestias que implicaría volver a hacer obras en la zona una vez terminada la conversión en peatonal, tal y como estaba en las previsiones iniciales de la compañía».

Desde el Ayuntamiento aseguraron que esta instalación, que la hará Redexis con sus propios equipos, no implicará retrasos apreciables en la evolución de la obra pero sí que puede comportar «una mejora considerable en la comodidad de los vecinos de la zona», ya que en las citadas calles hay bloques de pisos antiguos que no tienen ascensor, lo que complica el suministro regular de gas.

Un muro molesto

Por otra parte, el Ayuntamiento de Santa Eulària también ha llegado a un acuerdo con la propiedad de una vivienda unifamiliar situada en la confluencia de las calles Isidor Macabich y Sant Llorenç.

Se trata de una vivienda cerrada con un muro que ocupaba toda la propiedad y que no estaba alineado con el resto de fachadas. La pared impedía, según el Consistorio, la extensión de la acera y estrechaba la zona de circulación, lo que hacía el paso imposible o muy peligroso.

Ahora los propietarios han permitido la ocupación de unos 40 metros cuadrados de espacio para, como mínimo, poder mantener la zona de paso de vehículos que se mantendrá dado que existen varios garajes. En cualquier caso, la calle pasará a ser residencial, lo que implica una limitación de la velocidad máxima de circulación a 20 kilómetros por hora y ceder la prioridad a los peatones.