La risoterapia utiliza diferentes juegos y técnicas para provocar la risa entre los participantes y romper el hielo entre ellos. | Toni Escobar

Abrazos de ‘teletubbies’, intercambio de miradas, ojos vendados para jugar a la gallinita ciega... El objetivo de la risoterapia es lograr a través de diferentes juegos y técnicas que las personas que la practiquen se relajen y puedan sacar una sonrisa o, en el mejor de los casos, una carcajada.

Carmen Sansano, terapeuta de crecimiento personal, fue la encargada de impartir ayer el taller de Risoterapia y Netoworking que se llevó a cabo en el Viver d’Empreses en colaboración con Joves Empresaris destinado a personas emprendedoras. «¿Sabías que la energía terapéutica más poderosa que existe es la del amor y la de la risa?». Así resumió Sansano los beneficios de la risoterapia, una técnica que no solo agudiza los sentidos, sino que también activa el metabolismo. «Cuando estás riendo, tu cuerpo vibra con mucha fuerza y la circulación se activa», explicó.

Ámbar, una recepcionista de hotel, acudió a la sesión con la intención de aplicar la risoterapia a su jornada laboral. «La gente viene cabreada, estresada por el viaje al hotel y la recepción del hotel es el primer encuentro con el cliente para cambiarle la energía y que puedan arrancar con buenas vacaciones», afirmó.

Todas las participantes coinciden en destacar que el buen humor es fundamental en la vida y en el trabajo. «La gente está muy estresada, incluso en Ibiza. Si consigues relajarte, el humor viene después». Lo dice Marta, responsable de un estudio de arte y tecnología que decidió participar en el taller para afrontar de una manera más fluida las reuniones con clientes y evitar «la tensión» que se produce a veces en este tipo de encuentros.

Pero los beneficios de la risoterapia no acaban aquí. Es la segunda vez que Neus participa en una sesión como esta y cree que esta disciplina «hace aumentar la creatividad». De hecho, su intención es montar una empresa dirigida a los niños pero quiere ir más allá y «no hacer la típica piscina de bolas».

En esta ocasión, el objetivo de la sesión se ha cumplido. Las participantes rompen el hielo y, en apenas unos minutos, actúan como si se conocieran toda la vida. Satisfecha de los efectos de sus clases, Carmen Sansano destaca que, a través de la risa, se anima a las personas a intercambiar experiencias y a conocerse mejor.